El próximo domingo veintiséis de febrero se tiene programada una nueva marcha para protestar en contra del Plan B de la reforma electoral de AMLO, a la que se sumarán casi setenta ciudades del país (incluida Aguascalientes), además de otras ciudades del extranjero, como Barcelona, Los Ángeles California y Washington DC.
Supuestamente, quienes planean acudir a la marcha del “INE NO SE TOCA”, lo hacen por convicción y no por formar parte del acarreo político, creyendo firmemente que una verdadera elección se garantiza con la estructura actual del INE y no con lo pretende crear -presupuestal y operativamente hablando- AMLO con su serie de reformas a las leyes secundarias en materia electoral.
Reitero, quienes acudirán a la marcha, será por convicción y por no acarreo o presión política, desde actores políticos, líderes sociales, obispos, comunicadores, investigadores, académicos y sociedad en general, se harán presentes en la manifestación, salvo aquellos que osen por quedarse en casa para disfrutar de un maravilloso domingo en compañía de su familia.
Así la cosas con la organización de la marcha contra el Plan B de AMLO, ahora veamos cómo van los preparativos de la marcha contra el plan DEINAI (Desaparecer el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales) perpetrado por el mismísimo AMLO, con la intención de cerrarle en definitiva las puertas a la transparencia y la rendición de cuentas en México.
La realidad es que nadie está organizando ninguna marcha en contra de plan DEINAI y sinceramente, no creo que lo hagan, a menos que esos mismos políticos, obispos, comunicadores, investigadores, académicos y sociedad en general, se les ocurra organizar una marcha fast track exigiendo al Senado de la República (en su mayoría integrado por MORENISTAS) la pronta designación de dos nuevos Comisionados del INAI, a fin de evitar la horripilante idea de desaparecer el INAI.
Ahora bien, si por alguna razón, pretendieran organizar esa marcha contra el plan DEINAI, ya no será necesario, pues el Consejo Consultivo del INAI se encargó de promover un amparo contra la negativa del Senado de la República de llevar a cabo las designaciones de una comisionada y un comisionado para ocupar las vacantes correspondientes.
Se sabe que promover el amparo no fue sencillo para el Consejo Consultivo del INAI, y no lo digo por su elaboración, sino porque la Jueza del Juzgado Décimo Séptimo de la Ciudad de México en materia administrativa, originalmente desechó el amparo (Expediente 1714/2022) al considerar que el Consejo Consultivo no era una instancia legitimada para promover amparos de esta naturaleza.
Tristemente para la Jueza del Juzgado Décimo Séptimo, no le quedó de otra que aceptar el amparo ya mencionado, por así ordenárselo el Décimo Segundo Tribunal Colegiado en materia administrativa, al reconocer que el Consejo Consultivo sí es una instancia legitimada para promover este tipo de demandas, sin necesidad de organizar una sola marcha o manifestación. Claro, eso no lo dijo el Tribunal Colegiado, pero era importante mencionarlo.
A partir de la admisión de este amparo, se prevén varias cosas y no son propiamente marchas o manifestaciones, pues como ya lo dije, se ve que a nadie le importa el INAI, la primera consistirá en que la Junta de Coordinación Política del Senado de la República someta al Pleno del Senado la designación de la comisionada y el comisionado del INAI, de entre las propuestas -trece candidatos- que tenían traspapeladas desde abril del año pasado.
La segunda, el desahogo de dos audiencias programadas para los días veintitrés de febrero y el catorce de marzo del presente año, relacionadas con el amparo promovido por el Consejo Consultivo del INAI, en las cuales la Jueza del Juzgado Décimo séptimo de Distrito en materia administrativa, analizará el cumpliendo de la orden dada al Senado para designar a los comisionados faltantes o en su caso, la justificación que pudo tener para no realizar dichas designaciones.
Una última cosa que pudiera llegar a pasar – y que en verdad sería un ideal-, es que el día de la marcha del “INE NO SE TOCA” esos mismos políticos, obispos, comunicadores, investigadores, académicos y sociedad en general, incluyan otra lona que diga “EL INAI TAMPOCO SE TOCA” pues con ello se buscaría sensibilizar aún más el respeto absoluto a las Instituciones encargadas de garantizar la democracia electoral, la transparencia y la rendición de cuentas de nuestro País.