CIUDAD DE MÉXICO. – Un niño de un año de edad falleció después de que su abuela le dio veneno de manera accidental, pensando que era jarabe para la tos, en Torreón, Coahuila.
Fue el 22 de enero cuando la abuela paterna estaba cuidando al menor porque su padre estaba hospitalizado en la Clínica 16 del IMSS y la madre lo acompañaba en su convalecencia.
El pequeño comenzó a toser y la abuela quiso aliviar su malestar con jarabe para la tos y le dio el contenido de un frasco que estaba en un envase para la tos.
A los cinco minutos de haberle dado a beber la sustancia, su nieto empezó a convulsionar, por lo que pidió ayuda para llevarlo al médico, indicó la señora.
El niño falleció por envenenamiento con un garrapaticida asuntol, de acuerdo con la necropsia hecha en el Servicio Médico Forense (Semefo).
Se presume que la abuela no sabía qué contenía el frasco, pero serán las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Coahuila, las que determinen su situación jurídica.