- Secretaría de Comunicaciones y Transportes emitirá el dictamen
- Al momento no hay ninguna línea de investigación cerrada
El fiscal general del estado, Jesús Figueroa Ortega, informó que no se ha descartado ninguna línea de investigación por el desplome del helicóptero Águila 1, por lo que será necesario esperar lo que determinen las autoridades federales, mismas que atrajeron ya el caso; clarificó que el operativo del pasado jueves surgió de la dependencia a su cargo, y el secretario de Seguridad Pública del Estado, Porfirio Javier Sánchez, accedió a coordinarse para llevarlo a cabo.
“Se habían planeado una serie de cateos por el tema de narcóticos en el municipio de Jesús María, y había también planeado el secretario y un servidor unos cateos en la salida a Calvillo, eran seis puntos de narcomenudeo, en las chatarreras era tema de robo de cable. El operativo salió de la Fiscalía del Estado”, explicó el fiscal al hacer un reconocimiento de los cinco integrantes de la SSPE a su entrega en pro de la seguridad de la entidad.
Detalló que luego de que se apagó el incendio del helicóptero se procedió al levantamiento de los cadáveres y los indicios, y para ello intervino un perito especialistas por parte de la empresa aseguradora, así como personal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, quienes llevarán a cabo el dictamen de causalidad, mismo que consideró se llevará al menos dos o tres meses.
Figueroa Ortega expuso que no hay ninguna línea cerrada, inclusive la de un objeto extraño que haya hecho perder el control de la aeronave, al referirse a la versión de que una parvada de pájaros lo provocó; en cuanto a la referencia de que se escucharon una serie de disparos, destacó que en la zona no se encontraron proyectiles, pues ya se realizaron entrevistas al testigo que manifestó haber escuchado disparos al momento de la caída del helicóptero, pero su versión presentó una serie de inconsistencias que permiten calificar la línea de investigación como no sólida. Recordó que dos de los tripulantes del helicóptero eran artilleros, y su labor era ir en la guardia para que, en caso de algún ataque, ellos tienen la obligación de disparar.
“No hay ninguna línea cerrada, pero hemos detectado que en uno de los videos más claros se ve una parvada de pájaros que va mientras el helicóptero estaba volando bajo, al final de cuentas para esas operaciones es la idea que el helicóptero esté relativamente más bajo de la altura permitida, por lo que estamos considerando nosotros como una de las posibilidades el que hay un objeto extraño que haya hecho perder el control de la aeronave”, explicó.
El fiscal planteó que otra línea de investigación que se sigue es una falla mecánica, puesto que el helicóptero había recibido su último mantenimiento en septiembre pasado.