- Hay dos escenarios posibles: mantener el esquema de salud que dejó el gobierno pasado; o gestionar colaboración mediante un convenio de trabajo con la federación
- La salud se debe abordar sin banderas políticas para el bienestar de la sociedad
En el 2020, el exgobernador Martín Orozco Sandoval tomó una de las decisiones más representativas de su sexenio como oposición al gobierno de Andrés Manuel López Obrador: el panista decidió no adherirse al nuevo sistema de salud que reemplazó al hoy extinto Seguro Popular, al Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI).
A lo largo de sus últimos años en el gobierno de Aguascalientes, Orozco Sandoval comentó que tomar esa decisión fue difícil, pero fue la correcta, ya que se optó por no cederle a la federación toda la infraestructura de salud -como el nuevo Hospital Hidalgo-.
Sin embargo, ahora con el cambio de gobierno en la entidad, el panorama podría cambiar. Según el doctor Rubén Galaviz Tristán, actual titular del Instituto de Servicios de Salud de Aguascalientes (ISSEA), esta semana la gobernadora Teresa Jiménez Esquivel y él tuvieron reuniones con autoridades de salud federales.
Una de ellas fue con Juan Antonio Ferrer, titular del INSABI, y fue justamente para hablar de la posibilidad de colaboración del estado y la federación a través del INSABI. Tal fue la apertura que encontraron con este funcionario federal, que incluso se plantearon dos escenarios posibles, el primero, seguir con el esquema tal cual se tiene ahora, y el segundo, empezar a gestionar un convenio de colaboración como se tiene con otras entidades federativas.
“Si ustedes ven el histórico, no había habido una buena relación entre el gobierno estatal y el gobierno federal en el área de salud. Ella -Tere Jiménez- ya rompió este tabú. Se generó la reunión. Estuvimos con Antonio Ferrer, que es el encargado de INSABI y conocimos a detalle qué es el INSABI, cómo son sus reglas de operación, cómo trabaja y, sobre todo, lo más importante es que la gobernadora en cuanto llegamos al escenario, pues puso de manifiesto que para el estado de Aguascalientes no hay intereses políticos, no hay intereses de partido, lo que se pretende es el bienestar general de la población y la salud es una parte clave de esto”, narró Rubén Galaviz.
El titular del ISSEA agregó que “hubo una apertura total de Antonio Ferrer”, y derivado de esa junta fue que desde el viernes llegaron a Aguascalientes cuatro de los directores generales del INSABI para hacer un diagnóstico situacional con el fin de revisar cómo se encuentra la entidad en capital humano, en infraestructura y en la parte administrativa.
Sobre los acuerdos y el diálogo entre el gobierno estatal y el INSABI, Galaviz Tristán abundó: “vamos a trabajar en equipo. Se presentaron tres escenarios: uno, seguir como estábamos ahorita, sin ninguna participación de tipo federal, más que el esquema que se tiene de 70/30 que mencioné la vez pasada. Antonio Ferrer fue muy claro, dijo: ‘no hay obligatoriedad, si quieres seguir con el esquema, adelante’”.
“Hay otro escenario, el otro escenario es que les ayudemos a hacer el diagnóstico situacional del estado que tiene la Secretaría -el ISSEA- sin ningún compromiso, y el tercer escenario es trabajar ya bajo un convenio que permita al estado tener el fortalecimiento de la parte federal”, dijo.
Cuestionado respecto a si esto podría significar una colaboración entre estado e INSABI, Galaviz Tristán respondió:
“Los vamos a valorar en función de este diagnóstico situacional y de conveniencias. Lo más importante es que no hay obligación.
La federación nos dijo: ‘no hay problema si ustedes quieren seguir igual, pueden seguir igual; estos son los beneficios, estas son las condiciones, hagamos un trabajo de ejercicio en conjunto y después viene la toma de decisiones. Ya ustedes van a decidir si les apoyamos, si no les apoyamos, qué compromisos adquieren y qué trabajo’”, concluyó el doctor.