Una conversación con Alicia Cruz por Angeles Montañez
El 11 de octubre se anunció que la ciudad de Aguascalientes fue seleccionada como la Capital Americana de la Cultura 2023. Tras este nombramiento, el Gobierno del Estado declaró que se impulsarán apoyos para artistas y creadores, además, el director del Instituto Cultural de Aguascalientes, Alejandro Vázquez Zúñiga, sostiene que durante esta nueva administración se descentralizarán los eventos culturales para unificar al estado.
Queda mucho qué reflexionar sobre las recientes decisiones en el ámbito artístico en Aguascalientes, conversamos con Alicia Cruz, artista visual, gestora cultural y coordinadora de Diversa y del Laboratorio de Arte LGBT+. El trabajo de Cruz explora y hace crítica al binarismo de género, la investigación de identidades no heteronormativas a partir de retratos y autorretratos; así como la crítica social, política y cultural hacia las instituciones encargadas de la promoción de la cultura, la religión y los derechos humanos, utilizando como soportes principales la investigación social, la autoetnografía y la performance. Su trabajo como activista de los derechos LGBT+ la han llevado a presenciar en primera fila las necesidades básicas de los artistas en el estado.
Angeles Montañez (AM):
Alicia, en 2018 se realizó la primera edición del MARICA FEST, un espacio que llenaste de literatura, teatro, música, artes visuales, donde reuniste representantes de toda la República, ¿podrías platicarnos un poco de este evento?
Alicia Cruz (AC):
Claro, MARICA FEST nace con el objetivo de compartir el trabajo que artistas de la Disidencia Sexual en el Estado estábamos haciendo, compartirlo con las personas que transitaban en el espacio público y comenzar a detonar afectos, diálogos, risas, encuentros. ¿de dónde surgió la motivación? Bueno, Diversa surge por la falta de espacios en materia de cultura enfocados en Diversidad Sexual, así que construir, armar y gestionar un MARICA FEST parte de eso, además de que uno de los motivos principales era el de conmemorar una fecha importante en la lucha del movimiento LGBT+ en Aguascalientes, aquella que habla sobre un anuncio en el balneario del Ojocaliente que decía: “Se prohíbe la entrada a perros. Se prohíbe la entrada a Homosexuales”. A partir de la publicación de lo sucedido, entre el 24 y 25 de agosto del año 2000, consideramos que era un parteaguas de la lucha por la defensa de los derechos de nuestra comunidad.
AM: Mientras gestionabas Diversa y las distintas ediciones del MARICA FEST ¿encontraste obstáculos repetitivos?
AC: Durante las primeras ediciones del Festival recibíamos al menos a una persona de la sociedad civil diciéndonos cosas como: Son unos pecadores, Dios no los va a recibir en los cielos ¿Para qué hacen eso?, eso por parte de la sociedad civil; por otro lado, en la parte institucional, nos encontrábamos con formas de violencia simbólica, implicaban no poder llevar a cabo el festival en las fechas propuestas, durante el mes de agosto, para pasarlo a Septiembre; el principal obstáculo era la argumentación de que no era un festival cultural realmente, que el sentido era de protesta.
AM: ¿Cómo los resolviste?
AC: Confrontamos a las personas de manera calmada solicitando que se retiren, no buscamos generar problemas o pleitos. Hemos trabajado muchísimo en construir espacios seguros, llenos de afectos y ternura, donde nos sintamos con la libertad de expresarnos y ser nosotres mismes. Por otro lado, con la institución, es también un afrontamiento directo, ir todos los días para buscar las maneras de que lo que estamos haciendo tenga un espacio y lugar. No debemos olvidar que el trabajo de las instituciones es la gestión de los recursos públicos, es decir, los recursos no le pertenecen a la institución, solo los resguardan y administran, nuestro actuar como ciudadanía es tener acceso a ellos de manera responsable y segura, así que trabajamos y abonamos por construir desde la responsabilidad y cuidado de esos recursos que son prestados, al inicio muy a regañadientes, más a fuerza que de ganas.
AM: Los eventos del festival normalmente se llevan a cabo en espacios públicos de la ciudad, como el Jardín de Jacarandas, tras esa experiencia ¿crees que es difícil encontrar espacios para este tipo de eventos?
AC: Los espacios pueden ser cualquiera, depende mucho de los objetivos de cada quién, nosotres hemos decidido los patios por usos arquitectónicos y de facilidades en muchos sentidos, espacio de sombra, luz, resguardo de materiales, abiertos y con la posibilidad de que cualquier persona pueda acceder a cada uno de los eventos compartidos. Ahora, si hablamos del acceso al personal, al principio lo es, lo fue para nosotres, recorrimos en 2 ocasiones las fechas porque se había ocupado el espacio porque no “cumplíamos” con todos los requisitos para poder comprobar que era un evento cultural.
Ahora, los espacios son públicos como bien lo dices, en teoría, tendríamos el acceso a ellos sin necesidad de contar con un permiso, podríamos llegar y montar todo lo que necesitamos para después irnos, pero hemos decidido hacer los procesos protocolarios, implica una gestión mucho más larga, mucho más insistente y con mayor resistencia.
AM: Dice la nueva administración que se apoyarán más a los artistas del estado y habrá una notable diferencia en ese aspecto en comparación al gobierno anterior, según las propuestas del gobierno de Tere Jiménez ¿piensas que la Capital Americana de la Cultura 2023 esté lista para cubrir las necesidades de los artistas en Aguascalientes?
AC: No sé si cubrir, finalmente la Capital Americana de la Cultura es solo un reconocimiento cultural, una forma de gestión, promoción y difusión del trabajo que Aguascalientes hará durante su actual administración, que es algo que en práctica ya se hace desde hace tiempo inclusive de manera independiente.
La promoción del trabajo de artistas sucede no solo por la institución y el nombramiento de organismo internacionales o nacionales, ha sucedido gracias al esfuerzo de las, los y les creadores que han optado por seguir luchando y resistiendo frente a las carencias que el sistema cultural presenta, entre ellas, el acceso a recursos que permitan los patrocinios fuera del Estado.
Ser nombrada como la Capital Americana de la Cultura representa un reto para la institución, pensando en que la promoción implica el uso de recursos económicos, y sabemos que la organización que otorga el nombramiento no designa, así que, más allá de sí la ONG está lista para cubrirlo, la pregunta es si el Gobierno de Aguascalientes tendrá la capacidad de hacer la gestión sin llegar a la precarización del trabajo de las, los y les artistas de Aguascalientes, y por ende, a coartar los derechos culturales y generar políticas culturales reales y locales que garanticen derechos reales, que no seamos sólo utilizados como siempre ha sucedido.
AM: ¿Qué sectores consideras tú que necesitan más visibilidad en ese aspecto?
AC: Quisiera decir que alguno en particular, pero cada uno de los sectores tiene sus propias necesidades y que requieren ser atendidas de manera particular para generar las herramientas reales que les den visibilidad.
AM: Y a todo esto ¿cuáles crees que sean, realmente, dichas necesidades culturales? ¿cómo puede mejorar la difusión cultural en el estado?
AC: Bueno, una de las necesidades culturales es una Ley que garanticen derechos reales a los, las, les ciudades de Aguascalientes, no solo es acceso a eventos gestionados por la institución, tenemos que ver mucho más allá.
Existe una Ley de cultura joven del año 2010, creada durante el Gobierno de Luis Armando Reynoso, que se aboga por la difusión y la promoción de lo que sólo la Institución genera y crea, es decir, omite por completo el garantizar de derechos a los, las y les trabajadores de la Cultura, omite por completo, la difusión, difusión y reconocimiento del trabajo de espacios independientes, se desconocen los recursos y la manera en cómo estos se ven empleados, por ende, no existen recursos etiquetados para lo que está fuera de la institución, sin considerar programas como PECDA o PACMYC. ¿Qué trabajo real en materia de Derechos Culturales ha garantizado la institución? ¿más que promoción y servicios?
AM: Desde tu experiencia como gestora cultural ¿qué esperas de la propuesta del director del ICA? sobre descentralizar los eventos artísticos.
AC: Pienso en el Aniversario de la Ciudad propuesto durante la administración de Jiménez como presidenta municipal, en el que sólo se diversificaron los espacios a los que los eventos llegaban y dejaron de suceder en el centro de la ciudad para acontecer en las colonias. Habría que preguntarnos ¿qué otras formas -además de las ya ejecutadas con anterioridad- existen? formas que no impliquen sólo ir a aquellos lugares desde lo adoctrinante o colonialista, como diría Vázquez Zúñiga, que implique llegar a lugares donde la gente menos ha tenido, históricamente, acceso a las actividades culturales. Creo que la pregunta no es sólo qué actividades llegarán, sino ¿cuál es el problema real? ¿por qué que estás actividades nunca han llegado? Ni siquiera durante la administración del Municipio de Aguascalientes.
Creo que hay muchos retos en materia de Políticas Públicas Culturales, esperábamos que durante este gran evento y presentación, suscitado en el 10 de Octubre, se mostrará una agenda de trabajo que nos diera pauta e idea de la manera en la que la nueva administración estaría trabajando, sin embargo no sucedió, y, lejos de eso, nos dimos cuenta de que sigue existiendo una idea romántica sobre el hacer de las, los y les creadores del estado, con las palabras mágicas de la gobernadora en la que menciona “el artista vive de aplausos y reconocimiento”, en la que se omite un pago digno por nuestro trabajo.
No esperamos nada del Gobierno, con las, los, les artistas, todo, sin los, les, las artistas, nada.
Hace unos días escuchábamos a Diana Bracho, durante los premios Ariel, concluyendo que “Sin cultura no hay país”, ella, desde su trinchera como actriz, nos comparte que el desinterés y la falta de recursos limita, el arte debe apuntar al apoyo local, debe abrazarse desde los cimientos, no caer en la redundancia o el rezo de que “nadie es profeta en su tierra”; Aguascalientes resiste desde la expresión disidente, desde la periferia, desde la comunidad, y el que este año seamos una capital cultural debe traducirse en impulso local, en visibilidad hidrocálida.