El pasado miércoles 31 de agosto se presentó en el escenario del Teatro Morelos el célebre Réquiem en re menor, K. 626 de Wolfgang Amadeus Mozart con la participación del Coro Amicitia, una orquesta formada específicamente para este fin, solistas que surgen del propio coro que es dirigido por el maestro Daniel Romo y la dirección del maestro Emmanuel Siffert, director titular de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes.
Al terminar el concierto coincidimos algunos amigos en la parte posterior del teatro, cerca de la puerta de acceso para los artistas, ahí estuvimos platicando algunos minutos, entre ellos Arturo Reyes, violoncellista ya jubilado de la OSA y que participó en esta presentación, su esposa Erica Ortiz Juárez, también músico, ella violinista, el ingeniero Salvador Meza, ex gerente de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes y el maestro Siffert quien se mostraba fascinado por el resultado final del concierto, pero también por el Teatro Morelos, me comentaba que ya se estaba imaginando alguna ópera de Rossini o Cosi fan tutte de Mozart en este maravilloso escenario, cuyas dimensiones permiten un montaje operístico de estas características, espero que el maestro tenga oportunidad de realizar lo que con tanto entusiasmo me platicaba.
Este concierto se realizó con el fin de recaudar fondos para el próximo viaje que en pocas semanas realizará el Coro Amicitia a Italia para participar en un concurso en este país que evidentemente representa uno de los grandes centros operísticos del mundo. El Coro Amicitia, del que por supuesto sentimos un gran orgullo en Aguascalientes, es el único coro participante de México y uno de los dos representantes de América Latina que irán a este evento en Italia, por supuesto les deseamos todo el éxito que su trabajo y compromiso merecen.
En lo que va del año 2022, el Coro Amicitia ha estado muy activo en grandes eventos al lado de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, primero con esta misma obra, el inconcluso Réquiem del genio de Salzburgo, y después el gran monumento del sinfonismo universal, la gloriosa Novena de Ludwig van Beethoven con resultados…, no sé si decir sorprendentes, sorprende quizás por la juventud de los integrantes del coro, la juventud del mismo director, el maestro Daniel Romo tiene 28 años, pero no sorprende por el compromiso y la pasión con la que hacen su trabajo. Este tipo de repertorio, tú sabes amigo melómano, no es para principiantes, las dos obras en las que el Coro Amicitia ha participado con la OSA exigen un dominio absoluto de la técnica y una sensibilidad a flor de piel, es un repertorio de un muy alto nivel de exigencia, es asunto de músicos en toda la extensión de la palabra, experiencia, solvencia, dominio de la técnica, pero sobre todo pasión, si no hay pasión todo lo anterior carece de sentido, esa es parte de la identidad del arte, pasión incontenible, y esto es justo lo que encontramos en el Coro Amicitia.
Es justo mencionar que ni los integrantes de la orquesta que acompañaron el Réquiem, ni el maestro Siffert cobraron un solo peso por su trabajo, la idea es darle todo el apoyo al coro para reunir los fondos suficientes para su próximo viaje a Italia. Evidentemente el Instituto Cultural de Aguascalientes presto el Teatro Morelos, que por cierto lució lleno, además claro, de edecanes y todos los servicios del teatro con el fin de apoyar al coro en este compromiso en el que, no lo dudo, pondrán el nombre de Aguascalientes muy en alto en uno de los rubros más importantes, la cultura, insisto e insistiré una y otra vez que la cultura debe ser uno de los pilares más sólidos de cualquier programa de gobierno: la salud, la seguridad pública, el empleo y la cultura que, por supuesto, va de la mano con la educación, cuando sea esto posible tendremos una mejor sociedad, finalmente el contacto con las artes, con la actividad cultural nos hace mejores seres humanos, más sensibles y menos indiferentes a las necesidades de los demás, por eso iniciativas como estas, como el trabajo que hace el Coro Amicitia deben ser apoyadas sin condiciones y darles el lugar que se merecen en el panorama cultural de Aguascalientes. No tengo duda de que el Coro Amicitia está llamado a ser el coro que la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes necesita.
Por cierto, la Orquesta que acompañó el Réquiem de Mozart es una orquesta, como me lo platicó el maestro Siffert, una orquesta de teléfono, porque llamas a tus conocidos para invitarlos a participar en un concierto, en este caso con el fin de apoyar una cuasa. En esta orquesta vimos integrantes activos de la OSA, otros jubilados de esta misma entidad musical, integrantes de la Orquesta de la Universidad de las Artes, no sé, desde mi posición en el palco no tenía acceso a todo el escenario, ese es el problema de los teatros llamados Italianos, pero probablemente habría integrantes de la Orquesta Filarmónica de Aguascalientes, de la Filarmónica de la UAA no creo porque ellos tenían un compromiso para participar el pasado sábado 3 de septiembre en el Festival Internacional Cervantino en el Teatro Principal de Guanajuato trabajando bajo la dirección de su titular el maestro Marco Pruneda, acaba de tomar esta responsabilidad y de inmediato se encuentra con este gran compromiso, pero ya hablaremos de esto.
Deseo al Coro Amicitia mucho éxito en este viaje a Italia en unas semanas más, y reitero toda mi admiración, respeto y afecto por todos los integrantes y por su director, el maestro Daniel Romo, verdaderamente convincente su trabajo.