- Las grandes empresas utilizan lagunas legislativas para prolongar y recortar sus pagos de impuestos
- Deben explorarse modelos de contribución fiscal más equitativos; se necesita una reforma fiscal
Pese a que en el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador se pregona que las grandes empresas y los ultra ricos paguen los impuestos que deben al estado, en la realidad, estos siguen evitando y prolongando pagar el total de sus impuestos al amparo de la ley, explicó Luis Alberto Cabrera, subsecretario de Micros, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPymes) de la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDEC).
Cabrera comentó que los gobiernos deben de tener capacidad creativa para una reforma fiscal no sólo que sea más equitativa, sino que no dé cabida a, por medio de despachos de abogados poderosos, ayudar a que los grandes empresarios y las grandes industrias no paguen los impuestos que deberían.
“Sí creo que a veces nos falta creatividad como servidores públicos, seguramente hay modelos más equitativos de distribución del impuesto. La gran empresa, lo que tiene, no es que no pague, sino que simplemente utiliza los mecanismos y las lagunas legales para, con un cuerpo de abogados bien capacitado, generar las mejores estrategias para, al final del día, pagar lo que la ley les permite, porque al final lo hacen al amparo de la ley”, destacó Alberto Cabrera.
A la espera de una gran reforma fiscal, el subsecretario de MiPymes en la entidad considera que justo esos son los recovecos que tiene el sistema fiscal mexicano que no permiten que la gran empresa y los ultra ricos paguen los impuestos que deberían.
Eso, añadió, termina siendo injusto para los pequeños contribuyentes o incluso para las MiPymes porque, en proporción, estos terminan pagando más que los grandes contribuyentes. El tema es modificar la ley y evitar que “se permita ese juego”, agregó Alberto Cabrera.
De acuerdo a la asociación Fundar, el “1% de los mexicanos son los más ricos y son dueños de 40 de cada 100 pesos de la riqueza nacional. En el otro extremo, el 50% de la población vive en pobreza y sólo tiene 3.5 pesos de cada 100”. Para corregir esta brecha de desigualdad, propone, “el Estado debe recuperar recursos de quienes más tienen y luego usarlos en favor de las personas con menos ingresos”.
Uno de los casos más emblemáticos que muestran la renuencia de los grandes empresarios a pagar los impuestos que deben al estado es el del magnate Ricardo Salinas Pliego, quien tiene distintos juicios que han prolongado el pago de miles de millones de pesos que deben sus empresas al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Recientemente el Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) validó una resolución del SAT que obliga a saldar a TV Azteca -de Salinas Pliego- el pago de un crédito fiscal por un monto de más de dos mil millones de pesos por concepto de Impuesto Sobre la Renta, multas y recargos correspondientes de hace casi diez años, en el 2013. Algunos municipios de la República Mexicana tienen menos presupuesto que dicha cantidad.