- La nación vecina asegura respetar la soberanía mexicana para resolver los problemas de inseguridad y los ataques del crimen organizado.
- Ken Salazar, señala que están dispuestos a cooperar, pero sin sobrepasar los límites.
La semana pasada Jalisco, Guanajuato, Chihuahua, Baja California y Michoacán fueron escenario de una ola de violencia que no parecía terminar y que no sólo implicaba enfrentamientos entre grupos del crimen organizado y cárteles de la droga, sino que también implicó ataques a civiles. Algunos murieron.
Al respecto, durante la visita del embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, a Aguascalientes, este, acompañado del gobernador Martín Orozco Sandoval, mencionó que esos hechos de violencia no sólo afectan a los mexicanos, sino que también afectan inherentemente a estadounidenses que radican en México, y que incluso preocupan a empresas norteamericanas que invirtieron aquí y que emplean a mexicanos.
“La realidad es que nos afecta a nosotros también. Afecta a nuestros empleados. Ya sea en la producción de aguacates, en Michoacán, o ya sea en el consulado, donde tenemos una presencia grande, en Nuevo Laredo -Tamaulipas, un estado también con altos índices de violencia-, o en Juárez, Chihuahua-, o en Baja California, Tijuana”, dijo en una breve rueda de prensa relativa a su visita.
“Entonces, cuando ocurren esas cosas, como lo que ocurrió en la semana pasada -tiendas y vehículos quemados, bloqueos de carreteras, enfrentamientos armados, asesinatos-, nos afecta mucho porque la prioridad de nosotros, que es suprema, es de asegurar que nuestros empleados y los ciudadanos que andan visitando estos lugares, que tengan una experiencia segura, porque nada más así se puede hacer el trabajo”.
Sobre las políticas y operativos de seguridad que está llevando a cabo el gobierno mexicano, a cargo del presidente Andrés Manuel López Obrador, Ken Salazar comentó que la “realidad de la inseguridad es una cosa compartida” y por tanto, el país vecino y México deben tener una “cooperación profunda” en aspectos tan delicados como el trasiego armas, drogas y personas, prácticas todavía vigentes.
Aunque se están dispuestos a un trabajo colaborativo, pues el narcotráfico trasciende las fronteras, el embajador dejó claro que una premisa principal para esta cooperación es el respeto absoluto a la soberanía nacional, y por tanto respetan las acciones y los esfuerzos de la República Mexicana, de sus estados y municipios, para mitigar la inseguridad.
“También sabemos que los resultados son importantísimos, y por eso estamos trabajando para ver en qué manera podemos profundizar más la cooperación entre Estados Unidos y México con los recursos que tenemos nosotros, pero siempre con el respeto a la soberanía de México”, concluyó.
En el 2021 el Departamento de Justicia de los Estados Unidos catalogó al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) -uno de los grupos que participaron en los enfrentamientos y bloqueos, y el que más extensión territorial tiene- como el mejor armado y el “más poderoso” del planeta.