Vitacilina/ Bajo presión - LJA Aguascalientes
16/11/2024

 Si en alguna ocasión ha estado en desacuerdo con alguna decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador o se ha atrevido a demostrar desconcierto ante alguna de sus declaraciones, con seguridad, no ha faltado algún tetratransformista que le recomiende el uso de Vitacilina, ungüento contra quemaduras, raspaduras y heridas superficiales, una metáfora que muestra cómo se ha degradado la discusión pública sobre el gobierno en México, pues toda crítica, comentario o pregunta se reduce a que es la reacción de alguien que no sabe perder y por ello está ardido.

Las decisiones de un gobierno, el que sea, no deberían dividir a la población en dos únicos bandos: ganadores y perdedores; el ejercicio de una política pública únicamente se puede evaluar por el número de beneficiados o la forma en que mejoran las condiciones para todos; sin embargo, el discurso de la Cuarta Transformación ha establecido la idea de esta división con tal de justificar la continuidad de un proyecto que no tiene otro destino que cumplir con el deseo de López Obrador de pasar a la historia como el mejor presidente que ha tenido México.

Hemos sido incapaces de mantener la discusión pública sobre las decisiones gubernamentales en un nivel de diálogo que sirva para evaluar la capacidad de gobierno, cualquier intento por analizar estas acciones, invariablemente se torna en una discusión sobre la persona del presidente, no sobre los hechos, sino sobre López Obrador; antes que entender cualquier problemática, se prefiere la defensa irrestricta, desde la fe, de lo que se dicta desde Palacio Nacional; en ese ambiente viciado por la falta de argumentos, López Obrador aprovecha para no ser cuestionado sobre ningún asunto.

Lo más grave no es el festejo infantil con que los tetratransformistas reparten Vitacilina a los adversarios, es que la Oposición ha asumido una actitud reactiva, en vez de escuchar y atender las diversas problemáticas que siguen afectando al país y sus habitantes: pobreza, inseguridad, violencia, impunidad y desigualdad, han decidido que la tarea primordial es oponerse a cualquier cosa que diga López Obrador.

Cuando López Obrador se postuló por la presidencia, quienes se oponían a esta opción se inventaron que era un peligro para México, inundaron el país con posibles escenarios apocalípticos que ni siquiera el peor de los gobiernos prii stas había conseguido, intentaron por todos los medios sembrar un miedo irracional ante la posibilidad de perder el poder, y así nos fue, le entregaron a la Cuarta Transformación un salvoconducto permanente para no rendir cuentas, porque, al final, no se cumplió el desastre augurado.

Ante la devastación prometida por los adversarios de la Cuarta Transformación, cualquier error o dislate de la administración lopezobradorista es considerada un mal menor, porque un día estaremos en el paraíso prometido por el presidente, y esa promesa no puede ser evaluada por los agoreros del desastre, que ya demostraron su equivocación.

El presidente podrá seguir poniendo cumbias de Chico Che o mostrar su falta total de empatía con las víctimas mientras tenga la fe ciega de quienes le compraron que el país se divide en ricos y pobres; López Obrador se mantendrá sin rendir cuentas todo el tiempo que la Oposición lo permita, mientras sigan aferrados a un modelo de gobierno que basa su éxito en la persona antes que en los programas, mientras lo que se evalúe siga siendo la aprobación popular y no la efectividad de las políticas públicas.

López Obrador no es un peligro para México, la ausencia de una conversación pública sí lo es, mientras no se admita la diversidad de ideas y la necesidad de un proyecto de nación que tome en cuenta a todos, seguiremos en la arenga antes que en el diálogo.

Coda. En un almacén imaginario he guardado todos los ungüentos que me han enviado cada vez que me atrevo a cuestionar alguna decisión presidencial, alguien los necesitará cuando se den cuenta que la Cuarta Transformación no es más que un proyecto personal que no va a funcionar cuando la administración de López Obrador llegue a su fin.


@aldan


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Director editorial de La Jornada Aguascalientes
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