- Por medio de este cine podemos ver las distintas realidades que hay en México para reconstruir nuestro entorno
- Es necesario revalorar y exaltar las diferencias que hay en la sociedad para un mejor entendimiento de nosotros mismos
El cine documental desempeña un papel importante en estos momentos en que hay tanta polarización y tenemos que reconstruir nuestro entorno tras una pandemia. Este medio muestra las distintas realidades del país, nos muestra los tonos grises y los colores de la sociedad.
En México se detectó el primer caso de covid-19 el 27 de febrero del 2020, desde entonces la forma en que nos percibimos como sociedad cambió drásticamente, hubo cambios drásticos en cómo nos relacionamos y, desde luego, afectó al arte y al cine.
Paulina Suárez, directora general de Ambulante, Cine Documental Itinerante, resaltó que esta nueva realidad postpandémica ha sido retadora para el sector cultural pues se ha tenido que readaptarse y reinventarse constantemente imaginando nuevas posibilidades para el cine y sus públicos.
“Estamos en un nuevo proceso colectivamente, imaginando cuál es la relación entre lo presencial y lo digital; cuál es el rol público del cine en estos momentos de tanta polarización social; cómo reconstruir nuestra vida colectiva, nuestra vida comunitaria, en un entorno que ha sido fragmentado de distintas formas a causa de la pandemia”, declaró.
El convocar ampliamente a todos los sectores de la sociedad es el rol del cine documental y con ello se forjan contrastes sobre las experiencias de lo que es vivir en México. El cine documental busca articular una sociedad civil para que sea más fortalecida por la experiencia de presenciar producciones de forma conjunta.
Subrayó que un documental con diversas perspectivas invita al espectador a ver las cosas de otra manera, a tener una visión más crítica habitando distintas posturas.
Itzel Martínez del Cañizo, directora de programación de Ambulante, resaltó que se deben revisar las maneras en las que el cine documental logrará resonar desde lo micro hasta lo universal, revalorando y exaltando las diferencias culturales entre los territorios del país, pues esto genera un espacio de encuentro con otras dimensiones para relatar historias.
Precisamente señalan que algunas de las producciones tienen un mayor relevancia bajo ciertos contextos específicos, por lo que la gira de Ambulante permite tener un entendimiento desde diferentes ángulos.
El cine documental es un puente, una aproximación hacia otras cotidianidades, que se aleja de una idea de polaridad exponiendo los grises y los matices de cómo nos construimos como sociedad. De ahí el papel fundamental de este sector y la necesidad de una programación diversa. “El cine no nada más sucede en el momento en el que nos encontramos frente a la pantalla, sino todo lo que nos llevamos, todo lo que queda entre nosotros”, comentó.