- No existe un monitoreo para averiguar si hay feriantes portadores de covid-19.
- Hay un mensaje erróneo al sólo sugerir el uso de cubrebocas, opina experto.
Ante la todavía vigente pandemia del covid-19, la Feria Nacional de San Marcos (FNSM) termina siendo un laboratorio de vida real para ver el comportamiento de la enfermedad en la entidad, así lo consideró el infectólogo Francisco Márquez Díaz, expresidente del Colegio de Medicina Interna de Aguascalientes.
Luego de la aglomeración observada este primer fin de semana de la verbena, donde el primer día al menos hubo 200 mil personas presentes en el concierto del DJ Steve Aoki, Márquez Díaz comentó a este medio que “realmente estamos en un laboratorio de vida real” ya que “no hay un monitoreo para saber si hay feriantes portadores de covid-19”.
El experto también destacó que además de la falta de monitoreo, también hay un “mensaje erróneo para el uso del cubrebocas”, haciendo referencia a la determinación gubernamental de dejar como “opcional” su uso, siempre bajo la sugerencia de que este sigue siendo eficaz ante la enfermedad pandémica.
Márquez Díaz reconoció que probablemente la única “condición estable aparente” frente a la verbena, en la que se esperan cerca de ocho millones de habitantes, es la baja prevalencia de covid observada en las semanas pasadas, ya que los últimos indicadores de la pandemia han evidenciado un decremento en contagios, hospitalizaciones e incluso fallecimientos. Aún así, reconoció el doctor, “estamos en un riesgo si entrara una nueva variante”.
De acuerdo al último reporte del Instituto de Servicios de Salud de Aguascalientes (Issea), en la entidad se habían registrado 169 contagios de covid-19, cifra que no se había observado desde julio del años pasado y que no es ni siquiera el 10% de los 2 mil 300 que se reportaron la tercera semana de enero del 2022, en una de las etapas más críticas de contagios.