El coronavirus SARS-CoV-2 fue detectado por primera vez en Wuhan, una ciudad ubicada en la parte central de China. Este es causante de la enfermedad conocida como COVID-19, la cual rápidamente se diseminó en este país asiático y todo el mundo. Así fue como inició la pandemia global, la cual en 2022 cumple dos años de vigencia.
Si bien los primeros casos se reportaron en diciembre de 2019, después de analizar la situación sanitaria a nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud informó en marzo de 2020 que la diseminación de la COVID-19 es una pandemia.
Esto impulsó a que en todo el planeta se promovieran y, en algunos casos, impusieran medidas de contención. Varios gobiernos decretaron toques de queda, además de cierres de fronteras y otras medidas de emergencia. Estas acciones tuvieron graves consecuencias sobre las economías globales, pues se ocasionó una rescisión global que aún no se supera.
En Aguascalientes, el gobernador Martín Orozco Sandoval anunció el 14 de marzo de 2020 la activación de medidas de prevención sanitaria. Estas incluían distanciamiento social, lavado de manos, estornudo de etiqueta (en el interior del codo) y evitar saludar de mano o beso. Con el tiempo, estas recomendaciones fueron desatendiéndose.
Un día después, 15 de marzo, se confirmó el primer caso positivo de COVID-19 en la entidad. Se trató de una persona proveniente de España, de acuerdo a lo informado por la Secretaría de Salud local. De manera inmediata se tomaron las precauciones necesarias para mantener a este paciente en su domicilio, además de realizar la búsqueda de contactos que pudieran estar en riesgo.
La situación epidémica a nivel nacional llevó a que las autoridades federales implementaran lo que llamaron la Jornada Nacional de Sana Distancia. Esta consistió en la cancelación de eventos, así como la suspensión de actividades de varios sectores económicos y la reducción en el aforo permitido de aquellas consideradas como esenciales. Esto obligó a que millones de personas permanecieran en sus domicilios, en una cuarentena que se extendió por varios meses.
Además, el 24 de marzo se puso en marcha el modelo de detección Centinela, el cual consistía en la aplicación selectiva de pruebas para conocer el estado general de la epidemia en cada territorio mexicano. Estas medidas continuaron hasta junio de 2020, en lo que solo fue el inicio de una pandemia que ahora cumple dos años.
Como consecuencia de esto, las calles quedaron vacías, muchas personas vieron como sus ingresos se redujeron y otras tantas perdieron su empleo.
En cuanto a los efectos sanitarios de la COVID-19, miles de personas fueron contagiadas, gran parte de las cuales llegaron a los hospitales en situación crítica. Lamentablemente, en nuestro país han fallecido más de 320 mil individuos, dejando clara la gravedad de la enfermedad.
A dos años de estos acontecimientos, damos cuenta que la emergencia sanitaria aún no termina. Si bien la aparición de vacunas ha ayudado a que poco a poco se reduzcan los riesgos, todavía son perceptibles las consecuencias de uno de los momentos más críticos en la historia reciente de la humanidad.