- Con base en la inflación los costos subieron entre 7 y 10%
- Si persiste este contexto podrían limitarse las posibilidades de vivienda
Se incrementará este año el costo en la renta de viviendas, locales comerciales, oficinas y propiedades industriales entre 7 y 10%, informó Mario Alberto Álvarez Michaus, presidente local de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios, A. C. (AMPI), quien señaló esto como un ejemplo de cómo la inflación impacta al sector.
Consideró que los agentes inmobiliarios están saliendo adelante a pesar de que en 2021 las instituciones bancarias no aprobaron nuevos créditos para adquirir vivienda, situación que por fin se desentrampó.
Ahora la nueva complicación a enfrentar es el incremento en los precios de las rentas de bienes inmuebles, lo que provoca que la vivienda se encarezca, ya que generalmente el precio de las rentas se establece conforme a la valoración del inmueble, aunque también existen contratos en los cuales se fija como parámetro la inflación, o se acuerda un porcentaje de incremento anual entre las partes.
“Pensar en un 7 o 7.5% es algo que de verdad le puede pegar a las familias que están rentando, sin embargo, a quien le pega más es al dueño de la propiedad porque la plusvalía crece mucho más, por lo tanto, el rendimiento que recibe va a ser menor”, explicó el experto, quien consideró que estos incrementos tanto en los costos de las casas habitación como en las rentas, si persiste este contexto, podría encarecer las posibilidades de vivienda para las personas.
En este aspecto, en el caso de los propietarios, si quieren que su inversión les dé mayores rendimientos, lo indexan a los niveles inflacionarios, aunque hay quienes prefieren sacrificar el costo de la renta y mantener la vivienda ocupada; igual sucede con los locales comerciales y propiedades industriales, en los cuales el incremento promedio en estos alquileres ascienden hasta un 10%.
“Pues en este tipo de inmuebles, además de la inflación, también está influyendo el hecho de que existe en el mercado un repunte en la demanda de locales comerciales, oficinas y propiedades industriales, y aunque no se ha llegado a los niveles de ocupación prepandemia, el mercado se está estabilizando”.
Destacó que tras la revisión de diversos informes concluyen que esta situación impactará más en las viviendas de nivel medio, que cuestan entre el millón o millón y medio de pesos, y generarse una gran demanda, mientras que en las residenciales los compradores seguramente valorarán más otros aspectos, por lo que se espera más lentitud en ese tipo de ventas.