- Sin importar partidos políticos, es posible llegar a acuerdos y construir agendas comunes
- Vital, la regla de reconocerse y así llegar a pactos
Sólo a través de la unidad de las mujeres en los parlamentos serán posibles los avances necesarios para todas, señaló la legisladora Angélica de la Peña Gómez, al observar que aún se debe lograr que se abran espacios en las comisiones más importantes de los congresos locales y de la Unión.
Luego de recordar su experiencia legislativa, la perredista aseveró que los avances de los que ahora gozan las mujeres fueron gracias a que hubo unidad y acuerdos en agendas comunes, lo cual fue posible en la LXII Legislatura en la que fue senadora, pues cuando despegó fueron convocadas a una primera reunión para conocerse y empezar a trabajar sin descalificarse.
“Yo no llego a decirles a otra colega ‘yo sé más que tú’ o tú eres inculta en este tema’, ‘o yo soy feminista y tú no’, desde ahí empiezas mal, esa una pésima actuación que hay que desterrar; tenemos que construir una nueva cultura de la solidaridad y el reconocimiento de la otra, de la importancia de la otra”, manifestó.
Aseguró que ese fue el inicio para que la Legislatura en la que participó fuera muy exitosa, y no importaba que hubiera senadoras que no estaban en su comisión, pues si los temas les interesaban se les informaba porque confiaban en su trabajo, “y yo tenía confianza en lo que ellas decidían en sus comisiones”.
Consideró esa regla de reconocerse entre mujeres y así llegar a pactos, sin importar el partido político al que pertenecen es imprescindible, pues no es suficiente con que los parlamentos estén integrados con el 50% de las mujeres, pues es necesario saber cuáles son los problemas más sentidos por la sociedad, llegar a acuerdos, jalar a los hombres y empezar a legislar.
Además, consideró necesario y urgente que las electoras confíen en la labor de sus legisladoras están cambiando, que son capaces de reivindicar la política, y las mujeres cuentan con la capacidad y las condiciones para eso, así como para trabajar en beneficio del resto de las mujeres del país.
La ex legisladora descartó que la sociedad esté o no preparada para que la gobierne X o Z, al referirse a la posibilidad de que las mujeres sean gobernadoras o presidente del país, al recordar que ya han gobernado municipios, estados y en espacios públicos importantes, y al igual que los hombres pueden ser o no eficientes, ya que no es un asunto de género, pues quienes habrán de ocupar los espacios públicos son los que están preparados para hacerlo.
Lamentó que sólo cuando se habla de las mujeres en espacios públicos se exija preparación, mientras que a los hombres ni siquiera se les cuestiona su capacidad ni tienen que demostrar nada, “en todas partes hay mujeres que pueden asumir esas responsabilidades”.