APRO/Melisa Carrillo
La Unicef y la Unesco afirmaron que la reanudación de las clases presenciales “no puede esperar” a que los contagios de covid-19 bajen a cero ni a que los profesores y estudiantes estén vacunados.
Henrietta Fore y Audrey Azoulay, titulares de dichas agencias, coincidieron en señalar que “las escuelas deberían ser las últimas en cerrar y las primeras en reabrir”.
Sin embargo, aseguraron que los gobiernos han mantenido las escuelas cerradas “incluso cuando la situación epidemiológica no lo justificaba” mientras que bares y restaurantes permanecían abiertos.
Los organismos advirtieron que “es posible que nunca se recuperen las pérdidas que sufrirán los niños y los jóvenes por no asistir a la escuela” e instaron a los gobiernos a evitar “una catástrofe generacional”.
“Todas las escuelas deben proporcionar educación presencial lo antes posible, sin barreras de acceso, incluida la no obligatoriedad de la vacunación antes de entrar en la escuela”, concluyeron.
A un año y medio del inicio de la pandemia de covid-19, las escuelas primarias y secundarias permanecen cerradas en 19 países afectando a más de 156 millones de estudiantes.