Continuidad. Como cada tres meses, el presidente Andrés Manuel López Obrador rindió un informe “al pueblo de México” y, en algún momento, dio a conocer los resultados de una encuesta que realizó la Presidencia, con la que confirmó que cuando se realice la votación sobre la revocación de mandato, más del 70% de los mexicanos votará para que siga su sexenio, lo que López Obrador tradujo como que son más los que apoyan la continuidad de la Cuarta Transformación; si eso le basta al presidente para presumir, bueno, pues que ya no se haga la votación, mejor una encuesta.
Panzazo. Otra de las preguntas que presentó López Obrador fue sobre la evaluación de su administración, “en una escala del 0 al 10, donde 0 significa que lo hace muy mal y 10 muy bien, ¿qué calificación le daría al presidente de la República?”, la respuesta fue contundente: 6.7 promedio, lo que al titular del Ejecutivo federal le parece muy bien, considera que “estamos bien calificados”… ¿en serio?, es posible que cuando López Obrador cursó la primaria le tocara la escala de evaluación con letras, E de Excelente, MB de Muy bien… y bueno, ahora se califica con la numérica, y aunque 6.7 suba a 7, pues sólo alcanza para señalar que se está bien calificado, pero no que sea una buena calificación. Por supuesto, los fieles de la Cuarta Transformación nos van a decir que está bien calificado en comparación con los presidentes anteriores, entonces ahí ni discutir.
Mañanera. Esto informes trimestrales no son más que otra mañanera revolcada, es decir, en vez de a Lord Molécula y sus otros aduladores que se hacen pasar por reporteros, López Obrador da sus puntos de vista frente a un selecto grupo de su gabinete, quienes no dudan en aplaudir lo que el presidente diga, como que el país presenta ya signos de recuperación de la crisis sanitaria y económica; que la economía crecerá 6% o festeje como un logro propio que las remesas de mayo alcanzaron la cifra récord de cuatro mil 514 mdd; incluso le aplaudieron cuando dio que la incidencia delictiva ha disminuido, aunque todavía hay aumentos del 14%, en feminicidio en 9%, en robo de transporte público y 26% en extorsión.
Omisiones. López Obrador, por supuesto, festejó que en México se hayan celebrado elecciones limpias, incluso repitió los números que proporcionó el Instituto Nacional Electoral sin concederle en lo mínimo al instituto que preside Lorenzo Córdova, porque lo que le importa al presidente presumir es que él le ganó al bloque conservador, y ya después se siguió con una serie de mentiras, como que la oposición quiere desaparecer los apoyos a los pobres, la pensión a adultos mayores, a niños con discapacidad, las becas, y la atención médica, entre otros… en fin.
¿Seguro? “En materia de seguridad pública también hemos avanzado”, dijo López Obrador en la autoconmemoración para celebrarse tres años de mandato. Esta bien podría ser una más de las 56 mil 181 “afirmaciones falsas o engañosas” que según el analista Luis Estrada Straffon el presidente hace en sus conferencias mañaneras, el clima de inseguridad y militarización que se vive en todo el país fácilmente desmienten esta afirmación, así como el incremento del 14 por ciento en feminicidios, cifra que retomó a la ligera junto la disminución del 2% de homicidios y otros más, en estos tres años de gobierno. López Obrador podrá seguir culpando a los anteriores gobiernos, como lo hizo ayer, por “la complejidad del problema que heredamos”, porque no sólo se trata de que no se hayan creado nuevos grupos delictivos, sino que los de siempre siguen violando la ley y cometiendo delitos contra la sociedad, y por más que diga que “los que estamos enfrentando, no declarándoles la guerra, porque la violencia no se puede enfrentar con la violencia, sino con otros métodos más humanos y más eficaces, estamos atendiendo a los jóvenes, estamos atendiendo a los desposeídos, a los pobres, para que no tengan necesidad de tomar el camino de las conductas antisociales”, no vemos que esto funcione cuando las noticias de masacres, asesinatos, más militares en las calles y con más poder financiero, territorial y administrativo se apropian de las calles. En el caso de los feminicidios, sólo para esa mención le dio a López Obrador, pues también está documentado el incremento de violencia de género desde antes de la pandemia, pero mucho más como resultado de esta. Acá nos acordamos de la visita que hizo el 18 de junio a Aguascalientes la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno Federal, Rosa Icela Rodríguez, que declaró que es urgente una reforma penitenciaria con enfoque de género y en políticas públicas enfocadas a la prevención del delito, lo que suena tan bonito para cabecear una nota, pero que mejor resultaría si López Obrador lo tuviera en mente y en su autofestejo pudiera mencionar los nuevos esquemas para un modelo de justicia para la construcción de la paz, como dijo Rosa Icela Rodríguez, pero pues no fue así, saltó de tema en tema, se limitó a señalar que en temporada electoral “En Guerrero, por ejemplo, ningún candidato sufrió agresiones, y casi lo mismo aconteció en la mayoría de los estados”, mintiendo y despreciando a los 91 candidatos que fueron asesinados y las más de 900 agresiones registradas contra participantes de este proceso electoral, para todavía rematar con su típico “no poseo ni aspiro a tener el monopolio de la verdad absoluta”, esa falsa modestia hipócrita para santificarse, como el llamado a sus “adversarios”: “siempre recibirán del gobierno que represento, el respeto y la libertad, al que tienen derecho, para manifestarse sin límites, represión o censura”, eso mientras el relator de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Pedro Vaca, urgió al Estado mexicano a reconsiderar la sección “Quién es quién en las mentiras de la semana”, pues estigmatizar a la prensa y a los defensores de los derechos humanos “puede ser permisiva o generar un ambiente permisivo a que ocurran agresiones”, en un país con 20 asesinatos de periodistas y 4 desapariciones en estos 3 años que está celebrando el presidente. En honor a la verdad y justicia, esa que tanto dice defender, bien haría en guardarse los festejos.
Reprobado. El 6.7 es pasar de panzazo, pero no para el gobernador de Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, quien hizo un balance de la administración de López Obrador, y no le concedió en nada, sobre seguridad, dijo que el gobierno federal les ha dejado la chamba, “los estados somos quienes estamos sacando el trabajo adelante en los temas de delincuencia”; en materia de educación, Orozco Sandoval señaló que tampoco hay coordinación entre los estados y la Federación; “en cuanto a promoción económica no se diga, no se ha hecho nada, si bien a todos se nos cayó por el tema de la pandemia el año pasado, la Federación se sigue quedando cruzada de brazos y los gobernadores estamos saliendo a recuperar lo perdido”, agregó el gobernador: “si nos vamos al tema presupuestal no ha habido nada, absolutamente nada extraordinario, la disciplina financiera que tenemos es lo que nos ha hecho salir adelante”; en lo único que Martín Orozco le concedió al gobierno de López Obrador fue en la coordinación de todas las instituciones para las jornadas de vacunación… Duro.
Arrancan. Ya en temas locales, una vez aplacadas las aguas tanto por la prudencia de Teresa Jiménez Esquivel como de Antonio Martín del Campo, no se está hablando de la sucesión de Martín Orozco Sandoval, y la atención se trasladó al Partido Acción Nacional, pues en noviembre se tiene que ir Gustavo Báez Leos, aunque en los hechos, el también diputado, desde hace mucho ya no tiene influencia alguna dentro del partido, así que desde ahora se está barajando una quinteta posible para ocupar el lugar de Báez Leos, la publicación corre por varios grupos de mensajes, muchos son los que quieren, sólo uno va a llegar: Ahmed Franco, Javier Luévano, Manuel Cortina, Alfonso Jurado y Alex Monreal, y quien sabe si sea uno de estos cinco personajes, ¿usted qué opina?
La del estribo. El titular del Instituto de los Servicios de Salud, Miguel Ángel Piza Jiménez, confirmó la defunción de una persona luego de ser vacunada, pero lo importante no es que Piza Jiménez haya revelado esta información, sino la insistencia en vacunarse, dijo: “En este momento cualquier vacuna es buena, la que sea de cualquier marca porque poco o mucho es la que me va a proteger”. Exactamente, eso e insistir en que todavía estamos en pandemia, así que a seguirnos cuidando, para poder leernos el siguiente lunes y muchos días más.
@PurísimaGrilla