El día de ayer se jugó la final de la primera edición de la Nations League Concacaf, torneo que se creó en el 2019 como sustituto de los partidos amistosos para tener juegos más competitivos, además ayudar al desarrollo del fútbol en distintos países de las Naciones Norte, Centroamérica y el Caribe. El partido fue entre la ya más conocida en el continente norteamericano rivalidad de Estados Unidos contra México que a pesar de las polémicas arbitrales, del golazo de Diego Lainez, la mala defensa mexicana, el penal fallado de Andres Guardado, ninguno de estos temas causaron revuelo. Fue la afición.
Este tema ya lleva tiempo sin arreglarse, aunque por más que la Selección Mexicana haga protocolos o campañas para erradicar el grito homofóbico, las gradas mexicanas son tercas. Al principio la FIFA se apiadó de nosotros por lo que solo ponía sanciones económicas, sin embargo, cada vez se ponen más estrictos porque ahora van pueden penalizar la participación de la Selección en los Juegos Olímpicos hasta quitarle puntos a México de competencias oficiales por lo que se verían perjudicados en las eliminatorias al mundial de Qatar 2022.
El pasado Jueves presenciamos en el partido de México vs Costa Rica que se tuvo que parar el partido por los gritos para reanudarlo después de varios minutos,uno de varios remedios que usa la Federación para eliminar el grito, pero en el partido de ayer se vió a la afición tricolor muy molesta y no con el partido, sino con el pésimo arbitraje de la CONCACAF, lo que ocasionó que los envases de cerveza y proyectiles se vieran volando cuando se hacía una falta o cuando el seleccionado estadounidense iba a celebrar un gol cerca de los mexicanos, ellos se lo buscaron. Por cierto, Henry Martin también se llevó un duro golpe con dicho objeto. Esto tampoco fue del agrado de Gregg Berhalter, entrenador de Estados Unidos quien admitió al término del partido que fue una falta de respeto hacia ellos, que fue muy desilusionante y pudo ser peor, además reconoció que los tiempos extra fueron un desastre total por lo que felicitó a sus muchachos porque a pesar de todo se mantuvieron enfocados, concentrados y calmados, aunque se tuvieron que sobar en varias ocasiones. Por otro lado, Gerardo Martino se llevó su primera derrota oficial al cargo de la Selección Mexicana.
La rivalidad entre México y Estados Unidos es buena, siempre y cuando la entendamos solo como futbolística. Nada justifica el grito homofóbico y los proyectiles y la basura que se tiraron anoche al campo en Denver…
— David Faitelson (@Faitelson_ESPN) June 7, 2021