Nota inicial: Deberían de promover una reforma para cuando quieran reforma algo en materia de infancias o personas adolescentes se revise con lupa, se pase a lectura obligada por personas expertas, que se consulte en grupos focales con las personas a quienes afectara-beneficiara la reforma y ya luego que regrese al Congreso para su votación en el Pleno, se supone que eso hacen ¿o no?
Hace unos días el Congreso de Aguascalientes, sí esa legislatura que ha trabajado contra los derechos humanos aprobó por mayoría (1 abstención y fue por alguien que no estaba presente en el pleno) una iniciativa de reforma a la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes.
La iniciativa busca reconocer la violencia digital como un factor de violencia en las niñas, niños y adolescentes, pero a su vez limitar el acceso a la justicia al incluir que “En caso de que sea necesario, debe hacerse mediante autorización por escrito, o por cualquier otro medio que permita constatarla, de quienes ejerzan la patria potestad, tutela, guarda o custodia, quedando prohibido se lleve a cabo, si aun existiendo dicho consentimiento, pueda implicar menoscabo de su honra o reputación, que sea contraria a sus derechos o que los ponga en riesgo, conforme al principio de interés superior de la niñez”.
La iniciativa está mal redactada al no saber qué artículos se están reformando, al inicio del texto menciona la reforma a los artículos “Adicionan los Artículos 47 Bis y 47 Ter” pero en la propuesta hace mención a los artículos 46 y 74.
Entonces, ¿cuáles artículos fueron? comparando con la Ley en cuestión, las reformas fueron al 47 y 74 que justo en la propuesta de redacción son los que aparecen.
Ahora bien, limitar a las niñas, niños y adolescentes al acceso “a promover las acciones civiles de reparación del daño e iniciar los procedimientos por la responsabilidad administrativa a que haya lugar; así como dar seguimiento a los procedimientos hasta su conclusión” sólo con la autorización de madre, padre o tutor limita los derechos y su acceso a justicia.
¿Por qué?
Es lo mismo que pasa-pasó con el Pin Parental, el interés superior de las y los menores no puede ser condicionado por las ideas o creencias de las personas tutoras.
Ustedes estimadas personas lectoras podrán creer que todo tema de violencia debe ser atendido, pero lo que he observado en la violencia digital es que se cree que no existe, no tiene consecuencias en definitiva no pasa nada. Por lo que cualquier agresión en un espacio digital se cree que es exageración, mentira o quieren llamar la atención.
Justo por las investigaciones que he realizado (les invito a consultar chidasenlinea.org) las adolescentes buscan un primer acercamiento con sus amigas para contarles lo que están viviendo o en sus centros educativos o con personal docente de confianza lamentablemente muchos de esos acercamientos terminan en revictimización o malos acompañamientos.
Cuando les preguntamos porque no le cuentan a sus madres o padres su respuesta es: no me van a creer, me van a castigar a mí el teléfono (se culpa a la víctima), no entienden de lo que les hablo.
Es decir las niñas, niños y adolescentes no denuncian no porque no quieren sino porque no se les cree, se minimiza su denuncia, se cree que quieren llamar la atención o que están exagerando pero también se callan por miedo, vergüenza a la exposición de sus cuerpos, porque eso hemos enseñado que los cuerpos desnudos nos deben de causar vergüenza y que es mejor que no se entere nadie para no meterse en problemas, hemos enseñado a las infancias y adolescencias a callarse para que nadie se entere y que hacen: eso, callarse y callan por años y después de muchos años se animan a contar lo que vivieron.
Las niñas, niños y adolescentes cuando pasan por violencia ¿qué quieren?, que los mensajes dejen de llegar, que su familia no se entere, eso quieren, créanme cuando les digo que el “acceso a justicia” no piensan en ir a denunciar al C4.
Pero ojo con esto, no quiero decir que entonces las denuncias deben ser tomadas en menos o quitarle poder a las madres, padres o tutores lo que se debería hacer es pensar un modelo de acompañamiento holístico que involucre a la familia, escuelas, pares.
El trabajo de crianza no es fácil, necesitamos que las personas adultas que están criando se animen a ir entendiendo y descubriendo lo digital para poder acompañar, comunicar y generar la confianza para que las hijas e hijos puedan hablar en caso de una violencia.
No podemos condicionar los derechos del menor, al acceso a la justicia y a otros derechos solo con la autorización del tutor. Los derechos de las y los menores no pueden condicionarse. Tenemos que dejar de pensar en el acceso a la justicia desde la mirada adulta ya que esto puede vulnerar derechos.
Les invito a escuchar a las infancias y a las y los adolescentes quienes están generando estrategias desde lo individual y colectivo para acompañarse en casos de violencia digital cosa que la autoridad no ha logrado hacer.
Finalmente:
*El reportero de LJA.MX Gabriel Soriano cuestionó a la Diputada promovente de la iniciativa Mónica Jiménez quien respondió: “Es muy respetable la opinión, habría que analizar el tema en específico para si hubiera que reformar algo se pueda hacer”.
De todos modos, fue aprobado, claro, es preferible votar todo para que se vea lindo el currículo, aunque en el camino violentes los derechos de las niñas, niños y adolescentes.
*El 23 de abril es el Día de las Niñas en las TIC, desde Cultivando Género tendremos una agenda de actividades para que inviten a las niñas de casa o de la familia. Ese día tiene como objetivo decirles a las niñas que ser niña no es una limitación para estudiar lo que ellas quieran, motivarlas a estudiar y desarrollarse en áreas de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM por sus siglas en inglés).