- La pandemia acentuó deficiencias y debilidades
- México invierte en salud un porcentaje muy por debajo al recomendado por la OMS
La llegada al país del covid-19 hizo aún más evidentes las deficiencias del sistema de salud público al ser una constante la falta de personal, equipamiento, medicinas e insumos de protección para los encargados de atender la pandemia en primera línea, además de verse descuidadas otras áreas de atención médica, señaló el presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Aguascalientes, Iván Sánchez Nájera, quien consideró que ahora es el momento de fortalecer al sector y con ello el acceso a la ciudadanía a este derecho.
Destacó que en los últimos diez años, el gasto en salud en el ámbito nacional ha oscilado entre el 2.5 y 2.8% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, estándar muy por debajo de la recomendación de la Organización Mundial de la Salud que señala que cada país debería destinar al menos seis puntos porcentuales del PIB en el sector salud.
“La Organización Panamericana de la Salud, ha demostrado que si los países cumplen con dicho porcentaje tienen mejoras y tienden a la cobertura universal de sus servicios de salud. Por ejemplo, Estados Unidos invirtió el año pasado, un 14.38% de su PIB en salud, Alemania un 9.91% y Japón 9.32%. Incluso en Latinoamérica, México es de los países que menos invierte en su sistema de salud según la OCDE”, subrayó.
El perredista recordó que en Aguascalientes la saturación hospitalaria llegó a momentos críticos, con un porcentaje de fallecimientos por covid similar al nacional; y aunque considerando el número de contagios, el estado presentó niveles de letalidad inferiores al nacional, también por varias semanas se obtuvo la mayor ocupación hospitalaria en cuanto a camas disponibles con ventiladores y en áreas de terapia intensiva.
De forma independiente a la atención de los enfermos por covid, si bien el sistema de salud se caracteriza por retrasar consultas, pruebas de laboratorio, terapias y posponer intervenciones quirúrgicas por falta de personal o infraestructura, esta situación se acentuó durante la pandemia, al descuidarse otras áreas de especialidades, al no ser factible dar a los ciudadanos la seguridad de que puedan ser atendidos en cualquier institución hospitalaria pública de manera eficiente, lo que sigue siendo uno de los grandes pendientes por parte de los gobiernos federal y estatal.
Sánchez Nájera exhortó a las autoridades a invertir más en salud, asumiendo el reto desde el presupuesto estatal a fin de garantizar que en los Centros de Salud se cuente siempre con médicos y medicinas y llevando programas de prevención que, en un mediano plazo, permitirán reducir los costos de la atención hospitalaria, pues con ello siempre tendrá beneficios a largo plazo para la sociedad, ya que invertir en salud es apostarle a la vida de las personas.