- Advierte la diputada panista Paloma Amézquita que se buscarán los candados legales para evitar el uso lúdico en Aguascalientes
- Con una perspectiva moral, continúa la criminalización y el estigma a consumidores
Advirtió la diputada panista Paloma Amézquita Carreón que de haber avances en la legalización del uso lúdico de la marihuana el Congreso del Estado buscaría hacer candados legislativos en las normas estatales. Aunque este proyecto es de índole federal, los diputados locales, incluso los de oposición, insisten en estigmatizar el uso del cannabis.
Con 316 votos a favor y 129 en contra, se aprobó el proyecto de ley para legalizar el uso de la marihuana recreativa esto a dos años de que la Suprema Corte de Justicia dictaminó que su prohibición era inconstitucional. Ahora esta ley pasará al Senado para su votación.
Desde Aguascalientes, legisladores de mayoría y de oposición manifestaron no estar de acuerdo con lo resuelto por la Cámara de Diputados, insisten en estigmatizar el uso de la marihuana en términos lúdicos, pues dicen creer que provocará una adicción en el país.
Paloma Amézquita dijo lamentar la aprobación de esta iniciativa e incluso advirtió que desde el Poder Legislativo se buscaría alguna forma de frenar el consumo lúdico en Aguascalientes: “Habrá que ver cómo viene el dictamen para que el estado esté blindado”.
“Si fuera únicamente lúdico la verdad es que lo aplaudiríamos, pero la verdad es que el plan va para un consumo generalizado, terminará siendo una adición como el tabaco y el alcohol”, opinó el diputado Gustavo Báez Leos.
La diputada Érica Palomino Bernal del Movimiento de Regeneración Nacional, quienes desde la cámara de diputados impulsaron esta reforma, dijo esperar que el uso de los 28 gr de marihuana permitidos no incremente la drogadicción, aunque reconoció que el Congreso del Estado no tiene incidencia en este tema.
Según un estudio de la Universidad de Queensland en Australia, la nicotina y el alcohol son generan más adicción que la marihuana, e incluso varios expertos coinciden en que el cannabis no genera dependencia como tal.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) retiró a la marihuana de su lista de drogas y sustancias peligrosas en diciembre reconociendo así sus propiedades médicas y otro tipo de uso.
Menos violencia, impulso de la economía formal, recaudar más de impuestos y los diversos beneficios médicos que tiene la marihuana son los argumentos a favor, una perspectiva con derechos humanos y por el libre desarrollo de la personalidad. Con la aprobación también terminarían los prejuicios que se tienen sobre esta droga pues su consumo no representa un peligro palpable.
El caso del tabaco, el alcohol e incluso otras sustancias como la cafeína nos muestran que un consumo informado, responsable y libre no debe ser objeto de estigma social. Entender que el cannabis es un producto que cuando se utiliza de manera consciente y prudente no disminuye la calidad moral de las personas es de suma importancia para no discriminar ni coartar derechos.
El profesor investigador del CIDE, Fernando Alarid Escudero, ha señalado que en el debate de la legalización de la marihuana se ha enfocado en un discurso moralista y lecturas a media tinta pues ahora se tiene más evidencia científica acerca del consumo de la marihuana.