“A este sueño sin puertas, a esa mitad de ti en vuelo, desde una inocencia muerta, a esa mitad de ti en donde siembras tus ideas y tus rejas” Kalé Kurtz.
Las experiencias y contextos macrosociales como la mundialización y la globalización, sólo pueden ser asimiladas con éxito si existe el propósito de poder abatir el oprobio del mundo, en muchos de los escenarios la sociedad está viviendo una transformación, una radical transformación de su interacción, y de su manera de enfrentar su problemática atenuante, es necesaria una reforma al Estado, y cambio de giro al desarrollo humano y por supuesto la determinación para generar un equilibrio a un acontecimiento que procura el derecho y la libertad.
Es necesario manifestar que en nuestro país cada vez se encuentra como un territorio en el que campean las violencias, en particular la violencia sexual contra quien es diferente, la violencia y el feminicidio, algo inaceptable. Existe una prosapia histórica y progresista, en la que poco a poco se va adentrando al equilibrio, no obstante, existe un pasado de sombras que aún nublan el criterio del ignorante supino y de aquellos retrogradas que se niegan a entender lo esencial.
“A esa mitad de ti, que es mía, más que mi vida y que todas mis carencias, le dejo el tiempo sin sol de la espera. Le dejo la luz más antigua y la última certeza. A la otra mitad, a mi ahora le devuelvo el rumor de la ausencia y la posibilidad de ser lo que nunca hubiera sido sin ti, ni contigo” Kalé Kurtz.
Los movimientos de las mujeres han contribuido a un despertar de conciencias, del mismo modo al reconocimiento y ejercicio de la democracia y la vigencia de los derechos humanos, así como la redefinición y consecución de una ciudadanía renovada con los sujetos emergentes. Por la magnitud de lo que estamos viviendo se requiere y más y más cultura sobre el tema, el cambio de paradigma es más que necesario.
La mujer juega un papel distinto en nuestros días, existe un remanente temporal y del mismo modo una deuda histórica, no significa que nosotros seamos los actuales culpables, pero el tiempo nos concede la oportunidad de ser los responsables. La sociedad va avanzando en ciclos, creo firmemente que este es el tiempo de las mujeres y es algo que aplaudo, algo que celebro, todo aquello que genere equilibrios en el mundo es loable.
Para que el papel de la mujer se encuentre en la eudaimonia, es menester que exista una alianza de género, básicamente para establecer los derechos más esenciales y por supuesto el alcance de las responsabilidades en contextos de igualdad y de fraternidad, pues las personas de virtud entienden perfectamente que no hay caminos para la paz, puesto que la paz es el camino.
Cuando existe una sinergia social y una disposición aspiracional se construye la posibilidad para poder impulsar reformas jurídicas y cambios estructurales, que impactan tanto en lo económico como en lo social y por supuesto en lo político. La mesa es nuestra democracia. Estas palabras no refieren una felicitación, demarcar una conmemoración. Pues todavía hay mucho que hacer como para poder pensar en felicitar y aplaudir, no obstante, siempre es tiempo para reflexionar y para conmemorar, pues las cicatrices de nuestras madres, hermanas, amigas, maestras, esposas, nunca deben ser olvidadas. Son huellas imborrables en el decurso del tiempo.
En los países en donde existen mejores condiciones de equidad de género, es porque existe un mayor grado de educación, este particular elemento valida la posibilidad de seguir avanzando, no debemos pensar en dejar un mejor país para nuestros hijos, debemos de pensar en dejar mejores hijos para nuestro país. Estamos presenciando un cambio de ideología por la figura de la mujer, es un proceso que aun va madurando, y que requiere la entera disposición y tolerancia de aquellos que pretenden una patria ordenada.
La mujer debe ser entendida como una bendición, debe ser entendida como la vida, como el amor, como un ángel que protege, en este día como hombres creo que debemos agradecer al Gran Arquitecto del Universo por nuestras madres, esposas y todas aquellas mujeres que han hecho de nuestra vida algo sublime. Hoy no se celebra, hoy se conmemora.
“Le invento un surco y un tiempo para que permanezca en ti desde lo que soy, (sin saber si soy yo, o soy tú, o soy los otros, o soy nosotros o si todos son yo), porque si la verdad está afuera, el amor y la fuerza tal vez estén adentro”.
Kalé Kurtz.
In silentio mei verba, la palabra es poder.