En Psicología existe un mecanismo de defensa que se llama “Proyección” que en pocas palabras consiste en echarle la culpa a los demás de todo aquello de lo que no quiero hacerme responsable. Otro mecanismo llamado “Deflexión” es el equivalente de andarse por las ramas, o de darle vueltas al asunto en vez de afrontarlo de una buena vez. Uniendo estas dos maneras de actuar tenemos la razón de ser del chismoso. Es una persona que es capaz de difundir información aún cuando nadie se la esté pidiendo, pero nunca aceptará que fue él quien la inició. Por eso es que el chisme siempre comienza con “..me lo contaron..” o “…alguien que está enterado me lo dijo..” Con esto el chismoso pretende llenar un hueco existencial que trae desde sus años infantiles. Una carencia de personalidad que no ha sabido llenar. El chismoso no sabe crear sus propias ideas, por ello acostumbra tomar frases impactantes o populares y atribuirlas a personajes famosos sin tener el menor cuidado de saber si son o no verdaderas. Y con ello cree vestirse de sabiduría. Y el problema es que mucha gente repetirá el chisme sin tomarse la molestia de investigar si es verdad. Y así se repite hasta el infinito. Un ejemplo muy sencillo, recientemente en las elecciones de Argentina, la multitud reunida en la calle 9 de julio gritaba “Sí se pudo, sí se pudo” creyendo que es una frase nacida en las luchas políticas. Nada de eso. Ese grito alentador lo crearon los padres de familia de unos niños de Guadalupe N.L. cuando ganaron el Campeonato Mundial de Beisbol Infantil en Williamsport en 1997. “El pueblo unido jamás será vencido” ha sido atribuida a muchos revolucionarios pero sobre todo al Che Guevara. Claro que no. Es una canción que creó el grupo chileno de música folclórica Quilapayún para un festival en Viña del Mar en 1975, ocho años después de la muerte del Che. Y no tenemos que ir muy lejos, aquí en nuestro país innumerables políticos han repetido hasta el cansancio que Emiliano Zapata creó las frases “La Tierra es de quien la trabaja” y “Tierra y Libertad”. Por supuesto que no, Tierra y Libertad es el nombre de un periódico anarquista de Barcelona que se publicó en 1888 y la leyenda de que la tierra es de quien la trabaja había nacido en Rusia desde 1861. Acá en México la repitieron y popularizaron los hermanos Flores Magón. Zapata no escribió casi nada y en lo poco que hizo no aparecen las citadas frases. Muchos políticos se han atribuido la impactante consigna de “Es preferible morir de pie a vivir de rodillas” o se la han adjudicado a varios de nuestros héroes. Resulta que es el nombre de uno de los discursos más famosos de Dolores Ibárruri, la Pasionaria, líder comunista del País Vasco y una de las primeras grandes feministas de renombre mundial, que combatió el franquismo. Los chismes sobre los efectos letales de las vacunas anti covid19 son una prueba de ellos. La difamación sobre los efectos de la AstraZeneca son producto de una guerra comercial entre grandes monopolios farmacéuticos, solo que nadie se atribuirá haber iniciado el rumor. Y lo mismo sucedió con el origen del virus, cuando corrió la versión de que había sido creado en un laboratorio de ciencia ficción. El chisme es un producto de la escasa imaginación, cultura y prudencia de una persona que con ello pretende llenar sus vacíos de personalidad.