CIUDAD DE MÉXICO.- Las organización ONE reveló que los países más ricos del planeta acumulan ya mil millones más de dosis de vacunas contra el covid-19 de las que necesitan para inocular a todos sus ciudadanos.
Al presentar su último artículo de políticas, el organismo advirtió que el resto de los países del mundo solo ha conseguido 2 mil 500 millones de dosis, mientras que las dosis excedentes que han sido aseguradas por los países ricos alcanzarían para vacunar a toda la población adulta de África.
ONE explicó que esta acumulación excesiva es la encarnación del nacionalismo de las vacunas en el que los países priorizan sus necesidades de inmunización a expensas de otros países y de la recuperación mundial.
“Los líderes de las naciones ricas no harán ningún favor a sus propios ciudadanos ni al resto del mundo si almacenan vacunas. Si el virus puede prosperar en cualquier parte del mundo, aumenta el riesgo de nuevas variantes, y es solo cuestión de tiempo antes de que surjan cepas que socaven las vacunas y herramientas que se han desarrollado para combatir el covid-19, señaló.
Además, previó que si los países ricos monopolizan las dosis en lugar de asegurarse de que se distribuyan a nivel mundial podrían ocurrir el doble de muertes por covid-19.
De acuerdo con el estudio, el acaparamiento podría costarle a la economía mundial hasta 9.2 millones de dólares, de los cuales, la mitad deberían ser costeados por los países ricos debido a las interrupciones de la cadena de suministros y la crisis de la demanda.
“La única forma de prevenir variantes nuevas y más peligrosas es ralentizar la transmisión del virus mediante la vacunación generalizada”, indicó y agregó que los líderes del G7 podrían impulsar la lucha mundial contra el virus si acuerdan una forma rápida, justa y eficaz de compartir las dosis excesivas con otros países tan pronto como salgan de la línea de producción.
“Cuanto más rápido podamos proteger al mundo entero, más pronto terminará esta pandemia para todos nosotros y podremos comenzar la tarea de reconstruir y volver a encarrilar nuestras vidas”, afirmó.
Para que esto sea posible, Australia, Canadá, Japón, Reino Unido, E.U. y la Unión Europea deben actuar sobre los Principios para compartir las dosis de la vacuna covid-19 y asociarse con el mecanismo Covax para garantizar la redistribución equitativa de las dosis.
También deben establecer planes para comenzar a compartir las dosis excesivas a partir de que sus programas de vacunación alcancen una cobertura del 20% y abstenerse de disposiciones que impidan la donación de vacunas a otros países.