APRO/Arturo Rodríguez
El estimado del presidente Andrés Manuel López Obrador es que la economía mexicana crecerá este 2021 un 5%, una proyección que rebasa los pronósticos de diferentes entidades financieras.
En su primera conferencia de prensa en Palacio Nacional tras dos semanas de ausencia mientras era tratado por covid-19, López Obrador se mostró optimista y retomó los datos del optimismo económico.
La caída de 2020 se detuvo, según el presidente.
Y en efecto: de una contracción proyectada hasta en 12%, el resultado preliminar dado a conocer por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), el pasado 29 de enero, fue de 8.5%, un resultado que supera las condiciones de otros países y que hoy el presidente atribuyó a la política de ayudas sociales que mantuvieron activo el mercado interno.
De hecho, recordó el ejercicio de Ernesto Zedillo, cuando la crisis económica enfrentó rescatando a empresas y bancos con el Fobaproa, para luego destacar la diferencia de su política centrada en solventar las necesidades de la población menos favorecida.
La afirmación la apuntaló en los resultados obtenidos por las cadenas de supermercados un 6.1% de crecimiento en términos reales, equivalentes a 115 mil millones de pesos.
Luego, abundó en los datos de recuperación del empleo, la cotización del peso (que admitió una breve caída pero ya se recuperó), las remesas, así como en otros indicadores positivos, para luego afirmar que el país saldrá adelante de la crisis.
“Yo espero que este año vamos a crecer en general. Los más conservadores hablan de un 3.5% de crecimiento. Yo estimo que vamos a crecer 5% este año, vamos a ir superando la crisis económica”.
El mandatario destacó respecto a su política económica: “(El peso) ya volvió a fortalecerse. Desde que estoy en el gobierno no ha habido devaluación del peso, la inflación está controlada en 3.5 y es muy interesante que se sepa que ha aumentado el salario a casi 50% y se terminó con el mito de que no se aumentaba el salario porque aumentaba la inflación”.