Hace unos días la empresa de mensajería Whatsapp envió un mensaje a las personas usuarias, notificando la actualización de su política de privacidad, muchas dieron aceptar y continuaron con su día hasta que se volvió tendencia, durante días se ha estado hablando y se han generado muchas dudas en torno a lo que dieron aceptar.
Estimadas personas lectoras, ¿leyó las políticas de privacidad que le notificaba Whastapp?, ¿O su instinto de “dar clic todo” en una especie de confianza ciega a las plataformas le ganó?, no se apure, seguramente muchas más personas lo hicieron, pero lo van a negar.
Lo que sí es un hecho es que el monopolio Facebook-Instagram-Whatsapp busca unificar los mensajes de las plataformas, cosa que no es novedad, hace algunos meses pudimos ver ese cambio al unir las notificaciones de los mensajes privados que nos llegan desde Instagram con Messenger.
Ante las múltiples notas que se empezaron a publicar sobre las “nuevas políticas” una migración masiva se dio a Telegram como respuesta a alternativas “menos privativas”, “más seguras”.
Ya que andamos en eso, Telegram podría actualizar, dejar de tener acceso a mis contactos y eliminar la notificación que nos llega cuando una persona de nuestros contactos entra a Telegram que en los últimos días ha llegado mucha gente.
¿Pero es realmente seguro estar en Telegram?, fácil, sí y no.
Ninguna aplicación nos va garantizar el 100% de nuestra seguridad –lamento ser yo quien se los diga– la seguridad digital es un tema holístico que debe permear más allá de tener una aplicación “segura”. ¿De qué nos sirve tener Telegram si al primer test que aparezca en Facebook para ver cómo lucirán mis hijos vamos a entrar? o ¿cómo me veré de cabello morado?
Una de las cosas que más dicen es que Telegram es seguro porque notifica si hacen una captura de pantalla, pues eso es mentira, dejen les explico: si se inicia una conversación con los contactos que tengan en telegram así sin más ni modificar nada será como estar en Whastapp, si lo que se quiere es eliminar todo en cierto tiempo, no hacer capturas de pantalla, que nos se vea en el chat en la lap entonces tendrá que abrir un chat secreto.
Pero también nos encontramos con otro problemón, es que las políticas de Telegram prácticamente son inexistentes no dice, ni hay a dónde, ni con quien quejarse, justo en medio de la migración masiva a Telegram se encontraron con un canal (lo que en Whastapp sería un grupo) que compartía –comparte– packs (contenido íntimo de mujeres sin consentimiento de ellas) e información personal como su número de teléfono. Más de 300 personas.
Ese tipo de grupos no sólo están en Telegram, están en Facebook, Whastapp, Twitter y mientras sigan creando, consumiendo, solapando esos grupos sin entender de la violencia, las consecuencias, lo inseguro que vuelven la internet para todas las personas y lo poco que podemos hacer al respecto.
Repito, de nada sirve descargar una aplicación si no se va a leer, buscar, investigar antes de descargarla y saber de qué trata.
Otro detalle, el monopolio de las redes sociales también se ve beneficiado y motivado por las compañías proveedoras de servicios de internet y los gobiernos, es decir no contamos con una neutralidad de la red, ¿a qué me refiero? las compañías literal nos dicen que redes y plataformas consumir porque son gratis ¿o no?, cuando sacas un teléfono recargas saldo te dicen “Whastapp, Facebook bla bla ilimitado, gratis, etc.”
¿Cómo cambiarte de plataforma si te van a cobrar?
¿Entonces? Dónde quedaron las reglas del juego de las empresas para temas tan delicados como la falta de claridad de las plataformas, que mejor ejemplo que compararlo con la reciente expulsión de Trump de varias redes sociales. Por años el aún Presidente de EU mantuvo un discurso de odio y no se había hecho nada, pero después de varios sucesos su cuenta fue suspendida definitivamente ¿dónde quedó la claridad en las políticas de esas redes si se denuncian de una y mil formas páginas, grupos, canales, perfiles que distribuyen contenido sin consentimiento, etc. y no sé hace nada? y ojo no estoy hablando del aparato de justicia del estado, ese es otro tema aquí hago referencia a la justicia desde las mismas empresas de plataformas que parece que su mirada de justicia depende de qué tan mediático sea el tema.
Ante el miedo, corremos a lo que nos dicen que es seguro, pero no leemos y no nos preguntamos qué más podemos hacer por nuestra seguridad, la tecnología e internet no son neutras, reproducen prácticas de violencia, discriminación, falta de transparencia y acceso claro a la justica.
Internet debe ser libre, abierta y segura, pero no lo será si no recobramos la confianza y la seguridad.
@angieconter