Unidad, pidió y ofreció Joe Biden en el discurso de su toma de posesión como el presidente número 46 de los Estados Unidos, dijo que era ya el día de la historia y la esperanza, de la renovación. A los estadounidenses les pidió que se le unieran para luchar contra los enemigos que encaran: ira, extremismo, falta de empleos, de esperanza. El fin de la era Trump.
Sin mencionar por su nombre a su antecesor en el cargo, el presidente Joe Biden hizo en múltiples ocasiones referencia a Donald Trump, en especial cuando se ofreció como un defensor de la verdad y convocó a derrotar la mentira; así como cuando describió a quienes invadieron el Capitolio creyendo que podrían utilizar la violencia para silenciar. ¿El fin de la era Trump?
Donald Trump abandonó el cargo saliendo por la puerta trasera, sin grandes ceremonias y con un discurso final en el que, como es su costumbre, se llenó de autoelogios y conservó el mal hábito de decir mentiras; se fue de la Casa Blanca con el peor nivel de aprobación, cargando con más de 400 mil muertes por su irresponsable manejo de la pandemia y con la posibilidad de ser enjuiciado por incitar a la insurrección.
Sí, finaliza la era Trump, pero en la Casa Blanca, no necesariamente lo que ese personaje concentró para mantenerse en el poder y tener la fuerza suficiente como para conseguir el 46.9% de los votos en su intento de reelección, más de 74 millones de estadounidenses confiaron en él y querían cuatro años más de su muy personal estilo de gobernar. A pesar de los votos, de las muestras de fe y de la invasión al Capitolio, incluso tomando en cuenta todas las medidas de seguridad con que se llevó a cabo el cambio de estafeta entre administraciones, la era Trump llegó a su fin, no habrá más Donald Trump para Estados Unidos ni para el mundo.
Un estudio muestra que tras la cancelación de las cuentas en redes sociales a Donald Trump, la réplica de los mensajes de odio e incitación a la violencia se habían reducido hasta en un 70 por ciento, al no dar espacio a Trump para la vociferación esas redes no amplificaban su discurso; de ahí que se pueda señalar el fin de la era Trump, al quedarse sin tribuna, el empresario no tiene forma de ser el caudillo que una parte de Estados Unidos quiere.
No importa si Trump amenazó en su discurso de despedida indicando “volveremos pronto, de alguna forma”, no le alcanza para ser ese líder que se cree, no sin el auxilio de las redes sociales. Aunque se pueda declarar el fin de la era Trump, lo que no se puede indicar es que con la llegada de Joe Biden Estados Unidos se vuelva una nación posracial, el odio sigue ahí.
En Todo el mundo miente, Seth Stephens Davidowitz cuenta que en 2016, cuando nadie preveía el triunfo de Trump, cuando las encuestas, sondeos y analistas no le daban ninguna posibilidad de ganar, los datos señalaban algo distinto, “La maldad y el odio quedaban ocultos en las fuentes tradicionales de información, pero saltaban a la vista en las búsquedas que hacía la gente en internet. Esas búsquedas son difíciles de conciliar con una sociedad en la que el racismo es un factor pequeño. En 2012, yo conocía a Donal J. Trump sobre todo como hombre de negocios y animador de reality shows. Ni a mí ni a nadie se le habría pasado por la cabeza que, cuatro años después, sería un candidato presidencial serio. Pero esas horribles búsquedas no son difíciles de compaginar con el éxito de un candidato que con sus ataques a los inmigrantes y sus muestras de ira y resentimiento, a menudo alimenta las peores inclinaciones de la gente”.
Se fue Trump, se acabó, no así el odio y el resentimiento de millones de estadounidenses que lo respaldaron y que hoy están en búsqueda de otro camino para externarlo, con esos que polarizan, que insultan es de quienes tenemos que cuidarnos.
Coda. En la ceremonia de juramento de Joe Biden, destacó la participación de Amanda Gorman, la joven poeta leyó “The Hill We Climb”, en donde se pregunta ¿dónde podemos encontrar la luz en esta sombra interminable”, el poema, esperanzador, tiene varias propuestas, transcribo algunos versos:
“Para componer un país comprometido con todas las culturas, colores, personajes y condiciones del hombre / Y entonces levantamos nuestra mirada no a lo que se interpone entre nosotros, sino a lo que está frente a nosotros./ Cerramos la brecha porque sabemos que, para poner nuestro futuro primero, primero debemos dejar a un lado nuestras diferencias (…) Que incluso cuando estábamos cansados, lo intentamos./ Que siempre estaremos unidos, victoriosos./ No porque nunca más volvamos a conocer la derrota, sino porque nunca más sembraremos división”.
@aldan