Existe un incuestionable paralelismo entre estos dos grandes músicos de rock, ambos guitarristas, ambos ingleses, contemporáneos los dos, amigos incluso, quizás los mejores amigos. Pero además de todo lo anterior, hay un factor que los une, por curioso que esto pueda parecer, los dos se enamoraron de la misma mujer, y más o menos al mismo tiempo, ella es Pattie Boyd. Geroge la conoció durante el rodaje de la primera película de The Beatles, A hard days night en el año de 1964, en el film ella tiene una participación como extra, dos años después, en 1966 se casaron pero el matrimonio terminó en divorcio el año de 1977.
Quizás por su trabajo de modelo, Pattie Boyd estaba cerca de algunas de las grandes estrellas del rock, fue esposa de George Harrison, y un año antes del divorcio con Harrison tuvo una aventura con Ron Wood, integrante de The Faces y un poco más tarde pasó a formar parte de The Rolling Stones, concretamente a partir del álbum Black & Blue, disco de 1976, sustituyendo al gran guitarrista de blues, Mike Taylor, para mí la etapa de Taylor fue la mejor de los Rolling Stones.
Después de algunos años, en 1979, Pattie Boyd se casó con Eric Clapton, sabemos que él estuvo enamorado de ella desde los tiempos en que estaba casada con George y esto tiene que ver con la intención de dedicar el Banquete de hoy a estos dos grandes guitarristas ingleses y sus puntos de convergencia, y uno de esos puntos de convergencia lo encontramos en el mes de noviembre de 1970, hace exactamente 50 años estos dos grandes músicos publican inmensos discos de rock que son piedras angulares y referentes del género históricamente hablando.
El 9 de noviembre de 1970, el grupo de rock Derek & the Dominos publica su único álbum, un sólo trabajo pero de inmensos alcances y de muy alto nivel musical. Acompañan a Eric Clapton quien se encarga de la guitarra y voces, grandes músicos como el bajista Carl Radle, Jim Gordon en la batería, en los teclados está Bobby Whitlock y además Eric Clapton cuenta con la muy valiosa colaboración de Duane Allman, guitarrista de Allman Brothers Band.
Este disco tiene algunas canciones que son indispensables en la siempre inconclusa historia del rock, de este trabajo de donde se desprende el clásico Layla, finalmente es la que da nombre a la producción: Layla and other assorted love songs (Layla y otras diversas canciones de amor), composición de Clapton dedicada a Pattie Boyd, en ese momento, todavía esposa de Harrison, aunque durante el tiempo de la grabación del disco de Layla and assorted love songs Pattie y Eric ya se veían a escondidas. En su libro autobiográfico llamado Wonderful tonight: George Harrison, Eric Clapton and me, Pattie Boyd dice lo siguiente: “Nos vimos a escondidas en un piso de South Kensington. Clapton me había pedido que fuera porque quería que escuchara algo nuevo. Encendió el reproductor, subió el volumen y sonó la canción más potente que jamás escuché. Era ‘Layla’, trataba sobre un hombre que se enamora perdidamente de una mujer que lo quiere, pero no está disponible. Me la puso dos o tres veces, mientras miraba mi cara para ver mis reacciones. Mi primer pensamiento fue que todo el mundo me iba a reconocer”.
Después del divorcio de Pattie con Harrison, ella se casó con Eric Clapton en 1979, un año antes de la muerte de Lennon y 9 años después de la desintegración definitiva de The Beatles. Para demostrar que no había ningún resentimiento adverso y para reafirmar su amistad con Eric, Harrison asistió a la boda de su exesposa con su mejor amigo acompañado por Paul McCartney y Ringo Starr. Más tarde Eric Clapton compondría otra canción para Pattie: Wonderful tonight, aunque finalmente se divorciaron en 1989.
Aquel mismo mes de noviembre de 1970, pero unas semanas después, el día 27 para ser exacto, George Harrison publicó su primera producción como solista, un álbum triple extraordinario, para quien esto escribe, se trata del mejor disco solista de cualquiera de los Beatles, se llama All things must pass (Todas las cosas deben pasar), es un disco en donde el exBeatle cuenta con la colaboración de grandes músicos como es el caso de Billy Preston, Klaus Voorman, Gary Wright, Ringo Starr, y por supuesto, Eric Clapton, recordemos que la colaboración entre ambos ha tenido diferentes episodios, recordamos la grabación de la canción “While my guitar gently weeps” del White álbum de 1968 de The Beatles en donde Clapton toca el solo de guitarra y fue además la primera ocasión que alguien fuera de The Beatles, a menos que te llames George Martin, graba con ellos. La segunda fue Billy Preston en “Let it be”. También George Harrison participó en la grabación del tema “Badge” de The Cream y además está coescrita entre Clapton y Harrison quien aparece en la guitarra de acompañamiento acreditado como L’Angelo Misterioso.
Hace 50 años, en noviembre de 1970, entre otros muchos discos de primera calidad, encontramos estos dos, Layla and other assorted love songs de Clapton y All things must pass de Harrison. Hoy quise compartir contigo este paralelismo entre dos de los más grandes guitarristas en la siempre inconclusa historia del rock y que por más de una razón están indisolublemente unidos, no sólo por el tema de la música, también demostraron que ningún amor está por encima de la amistad.