¿Qué son las Aves Playeras? Las aves playeras son un orden de aves limícolas (del latín limus, ‘que vive en el limo o lodo’) de talla mediana o pequeña, patas generalmente largas, formas de pico puntiagudo (tamaño variado) y alas largas (puntiagudas). Están relacionadas con el agua, ya sea dulce o salada. En este sentido, pueden considerarse como “aves playeras” a todas las pertenecientes al orden biológico conocido como Charadriiformes (Charadrius, ‘pájaro acuático nocturno’ + morphe ‘forma’ (https://bit.ly/2GlLOQJ).
Estas aves se pueden encontrar alrededor de todo el mundo en casi cualquier hábitat abierto, desde los desiertos, sabanas y la tundra ártica, hasta las playas, campos de golf, lodazales y parques amplios. Hay unas 217 especies conocidas de aves playeras en el mundo, de las cuales 60 habitan en México, y entre ellas se consideran a 22 como especies prioritarias para la conservación. En Aguascalientes podemos encontrar alrededor de 18 de éstas a la orilla de cuerpos de agua como presas, bordos y estanques. Las más comunes son: las monjitas, los chorlitos, las avocetas, los zarapitos, los costureros y los playeritos.
La mayoría de las aves playeras son residentes, es decir, viven en la misma zona durante todo el año. La más común en nuestro estado es el Chorlo Tildío; pero hay otras que son grandes viajeras migratorias por excelencia, como el Playero Rojo, que anida en el Ártico (Norte de Alaska y de Canadá) y cuando se acerca el invierno, viaja a lugares tan distantes como la Patagonia en Argentina, es decir, realiza un viaje de hasta 24,000 km cada año. Un pequeño gran viajero que podemos ver en nuestro estado es el Playero Alzacolita, que es un ave pequeña que también anida en Alaska y Canadá, pero durante el invierno, algunos individuos llegan a visitarnos en Aguascalientes, permaneciendo aquí hasta que llega la primavera.
Las aves playeras generalmente son monógamas, es decir que forman parejas establecidas durante la temporada reproductiva; como muchas otras aves, presentan cuidado biparental, que es cuando ambos padres se hacen cargo de cuidar a sus huevos y polluelos. Debido a que anidan sobre el suelo, siempre están a expensas de que sus nidos sean destruidos por personas descuidadas y sus vehículos, además de que sufren depredación constante por parte de perros y gatos callejeros.
La gran problemática con las aves playeras, y prácticamente todas las especies de aves en México y América, es que sus poblaciones disminuyen año con año. En el 2019 se publicó una noticia con números alarmantes, ya que en Norteamérica se han perdido 3 mil millones de aves desde 1970 (3,000,000,000), lo que representa un 30% de la población de aves norteamericanas. El problema ya es bien conocido, y no solo afecta a las aves, sino a toda la biodiversidad. La contaminación, pérdida de hábitat, calentamiento global, urbanización, uso de pesticidas tóxicos, presencia de especies ferales e invasivas, etc. son algunas de las principales amenazas para estas aves.
Todos estos problemas no salieron de la nada, el humano es el responsable debido a que a lo largo de la historia ha drenado humedales para construir un nuevo y reluciente fraccionamiento o se han desmontado extensas áreas naturales para instalar una nueva nave industrial o un centro comercial. Pero también las pequeñas acciones cuentan, ya que muchos actúan con desdén e ignorancia y hacen cosas que justifican como inofensivas, como tirar una botella, pues creen que «no importa si tiran un envase, hay gente que tira más». Esto es un asunto de idiosincrasia nacional, pues justificamos una acción mala como menor, ya que hay otros que hacen algo peor; es decir, siempre limpiamos nuestra culpa echándosela a otros antes que asumir nuestra parte de responsabilidad y ser parte de la solución del problema. Esta falta de educación y consciencia provoca que algunas aves ofrezcan este tipo de desperdicios como alimento a los polluelos, o incluso las mismas aves quedan atrapadas en algunos de estos envases y/o contenedores plásticos.
Una forma de acabar con este modo de ser del mexicano es creando una cultura de atención, respeto y cuidado de los bienes naturales. Ejemplo de ello es como se ha inculcado una cultura del agua con frases como ‘Cuida el agua porque se acaba’. Así también se puede generar esta misma cultura hacia otros bienes y especies naturales, como las aves. Al respecto, muchas personas aficionadas a la observación de aves ya lo están haciendo apoyándose en las plataformas de ciencia ciudadana como ‘Naturalista’ y ‘AVerAves’, en las que se pueden enviar los avistamientos, lo que ayuda a recabar datos que pueden ser utilizados por científicos especializados para determinar lo que ocurre con las aves a diferentes escalas. Por ejemplo, el aumento o disminución de alguna especie en un sitio, lo que puede ser un indicativo de que algo está pasando y debe estudiarse.
Para que la población esté mejor informada acerca de estas plataformas y su uso, Movimiento Ambiental de Aguascalientes y el Grupo de Observadores de Aves de Ags. (AvesAgs) estarán llevando a cabo del 3 al 9 de septiembre, actividades en las que se invitará a la población a observar y contar este tipo de aves con la intención de recabar datos en las plataformas mencionadas y contribuir con ello a actualizar la situación de estas especies en nuestro estado. Esperamos con esto contribuir a desarrollar una cultura de conocimiento y sensibilidad hacia las aves bajo el principio de que ‘Lo que no se conoce, no se cuida’. Hacemos una atenta y especial invitación para que el 6 de septiembre, Día Mundial de las Aves Playeras, nos acompañen a conocerlas y observarlas en el evento que se realizará en vivo en la página de Festival de aves por Facebook.
Víctor Hugo Salazar y Guadalupe Castorena
Movimiento Ambiental de Aguascalientes A.C.
Daniel Alexander Carrillo Martínez
Grupo de Observadores de Aves de Aguascalientes (AvesAgs)
Facebook Festival de aves de Aguascalientes