- 20% de niños no tienen acceso a internet, 5% no cuentan siquiera con un teléfono móvil, esto sólo en la escuela del profesor Luis Berlanga
- En comunidades rurales, muchos padres no terminaron la primaria, ha sido un reto para que ayudar al alumno en su aprendizaje
- Necesario, quitar carga a los padres, muchos de ellos trabajan, tienen que cuidar de la casa y tienen hasta cuatro niños a los que tendrían que ayudar
El lunes se dio inicio formal al ciclo escolar 2020-2021 que, debido a la contingencia por Covid-19, será de manera virtual y en algunos casos será de forma híbrida. Fueron más de 300 mil los estudiantes en todo el estado que reiniciaron sus clases siendo el primer día caótico y con incertidumbre para muchas familias.
A muchos sectores les ha preocupado cómo se llevarán a cabo las clases a distancia en zonas rurales en donde se tiene a estudiantes que no tienen acceso a internet, dispositivos móviles, televisión e incluso radio.
Para Luis Javier Berlanga Echavarria, docente en una comunidad rural de Calvillo, en la zona 39, el inicio de clases en zonas rurales ha sido un reto importante: “El inicio de clases ha sido con incertidumbre, tratar de saber cómo vamos a trabajar, tratar de adaptarnos, de amalgamar los contenidos y todo lo que pide la Secretaría de Educación. Ha sido difícil, pero es un trabajo que tenemos que hacer y que es primordial para el país”.
El método de trabajo que se optó en la mayoría de las zonas rurales es por medio de un cuadernillo que deberá ser respondido por el alumno.
“Definitivamente varios alumnos y varios padres de familia no cuentan con los recursos suficientes para poder tener algún dispositivo digital o para poder acceder a internet”, dijo, siendo este uno de los más grandes retos.
Para garantizar la educación a estos niños, en los consejos técnicos, se elaboró un esquema de trabajo considerando los dispositivos que tenga cada niño. En dicha herramienta se contempló si el alumno tenía o no acceso al internet, si tuviese televisión, radio o acceso a cualquier dispositivo digital. De no tener ninguno de estos medios, se optó por hacer un material impreso para los alumnos.
El profesor Luis Berlanga calculó que, en la escuela donde labora, un 20% de familias sí tiene un dispositivo digital, pero sin acceso a internet fácilmente. Un 5% de alumnos no contaba siquiera con un dispositivo electrónico en casa.
Otro reto al que se enfrentaron los docentes de esta escuela fue el cómo se ayudará a los estudiantes para que aprendan el contenido: “Actualmente, y hablando de la zona en donde trabajamos, muchos padres de familia no acabaron la primaria. Lo que hicimos nosotros fue juntar temas, buscar información, videos, artículos para poder imprimírselos o pasárselos”.
Otra estrategia que se usó fue el grabar videos explicando las actividades tanto a padres de familia como a alumnos, aquellos que tuvieran dudas podrían comunicarse con los profesores por teléfono, videoconferencia o incluso acudir a las instalaciones con horarios de atención y las medidas sanitarias adecuadas.
De esta manera, según ejemplificó el profesor, dan la posibilidad al alumno que sea autodidacta antes de responder el cuadernillo.
Para la evaluación, detalló que se tomarán en cuenta distintos valores, en primera instancia será el alumno quien se autoevaluará, también será el padre de familia quien evalúe a su hijo y por último, se tiene una rúbrica más completa para que los docentes evalúen a los alumnos con base en los resultados en cuadernillos.
Berlanga Echavarria subrayó que uno de los objetivos que se establecieron en la zona fue quitar de alguna manera la carga excesiva de los padres de familia:
“Yo creo que es algo que todo maestro debe de tener en cuenta en estos momentos, muchos padres de familia están trabajando, atendiendo la casa y a veces no es un solo niño, a veces son tres o cuatro niños en una familia y a veces la mamá tiene que hacerse cargo de todo.
“La mayoría de los padres de familia están dispuestos a ayudar y apoyar, en estos momentos es cuando se han dado cuenta de la labor que realiza uno como docente y lo complicado que puede ser a veces el tratar de enseñar un contenido a algún alumno. Pero el trabajo en conjunto del alumno, los padres y el maestro se está viendo más reforzado que nunca, implementando nuevas estrategias y nuevas soluciones”.
El profesor Luis Berlanga subrayó que en las escuelas rurales se tienen a padres que se muestran más preocupados por la educación pues quieren que sus hijos se superen y salgan más adelante, además de que en ocasiones son menos accesibles las escuelas.
El docente señaló que, al inicio de la contingencia sanitaria, adaptarse a nuevas formas de educación ha sido un reto para el manejo de equipos, tener contacto con los alumnos. “Nos vino a desestabilizar a nosotros como maestros tanto emocionalmente como laboralmente, hablando en el aspecto que no teníamos las herramientas, fue unos momentos difíciles para muchos maestros, fue algo que tuvimos que adaptarnos a la tecnología o capacitarnos más para el trabajo con los alumnos”, comentó.
Luis Berlanga destacó que es importante que todos los docentes deben de establecer un apoyo entre colegas, estar unidos como maestros: “Creo que esto nos sirvió para unirnos más de lo que ya estábamos, podemos con esto y con más”.