El Cine y la Nueva Normalidad - LJA Aguascalientes
21/11/2024

Por Oswaldo Martínez R.

“…THE TIMES THEY ARE A-CHANGIN’…”.

– BOB DYLAN 

Desde que tengo memoria, acudir a un cine a ver una película fue una experiencia única, desde el primer momento en el que ingresaba a una sala de cine, al cruzar la puerta y entrar en la oscuridad de la misma, apresurarse a elegir  el mejor lugar disponible ( soy de los que les toco entrar corriendo a la sala para ganar el lugar). Me tocó incluso lo que se conocía como “permanencia voluntaria”, lo que significaba poder quedarte en la sala para la siguiente función una vez terminada la película, lo  cual te permitía ver cuantas veces quisieras aquella película que tanto te había gustado.

 Con el tiempo, como todo en esta vida, la experiencia de ver una película ha cambiado, y no solo por el cómo vemos una película y lo que sucede al rededor de esto, también las historias mismas que vemos en pantalla e incluso la manera en que actualmente se consumen los contenidos de manera global. Todo se va adecuando a los tiempos que vivimos, para bien o para mal. Hoy día el mundo  como lo conocemos cambio, y sigue cambiando cada día, ante la situación  sanitaria que vivimos en todo el mundo. De la noche a la mañana nos vimos forzados a vivir un confinamiento, a evitar lugares públicos y mantener lo que hoy se conoce como “sana distancia”, y así repentinamente las salas de cine cerraron indefinidamente, adecuándose a estos tiempos.

Los estrenos se pospusieron, las producciones se detuvieron , los proyectos se quedaron detenidos, todo porque hoy día no tenemos la certeza de cuándo regresaremos a la “normalidad”, hay quienes prevén que falta mucho para eso, o incluso algunos se aventuran a decir, (con mucha razón a mi parecer)  que las cosas nunca volverán a ser como antes. En este sentido sería bueno detenernos a pensar como esto está afectando o llegará a afectará a esta industria.

Primero en el caso de la industria creativa, es decir aquellos que se dedican al desarrollo y creación de las historias que vemos en pantalla , al principio, se han pospuesto los estrenos a partir del segundo trimestre del año y contando, pocos proyectos se atreven a definir una fecha de estreno en lo que resta del año al menos , recorriendo o postergando las mismas incluso hasta por un año. De igual modo se verán recortados presupuestos económicos, lo cual afectará directamente a determinar qué proyectos se llevarán a cabo, segmentando aún más lo que podremos ver como producto final, o casos como los que hoy vemos en China, mercado determinante en la industria a nivel económico, donde para disminuir el tiempo que los espectadores pasen en una sala, se ha decidid, hasta nuevo aviso ,proyectar películas que solamente duren máximo dos horas, afectando directamente el producto final que vemos en pantalla, o en su caso  aplazando indefinidamente  estrenos en ese mercado, como el caso de la nueva producción de Cristopher Nolan, TENET, la cual tiene planteada una duración de dos horas y trece minutos. Incluso se ha manejado la posibilidad de editar la película para poder estrenarse en el mercado asiático, ante lo cual el mismo Nolan ha manifestado un rotundo no a esta propuesta.

En el caso de los complejos cinematográficos se han tomado medidas drásticas, estas con el fin de apurar el regreso de la gente a las salas, medidas como aforos máximo de entre el treinta y cincuenta  por ciento por sala, la prohibición de la venta de alimentos, estimular la compra en línea para evitar filas así como el tiempo de espera en las instalaciones, el uso de asientos conjuntos de máximo dos personas, dejando lugares vacíos entre los asistentes, así pues la vida en el cine por el momento no volverá a ser igual.

 Las medidas, para algunos exageradas para otros insuficientes, al final van enfocadas a permitirle a una industria sobrevivir en estos tiempos, en los cuales quizá es donde más hace falta voltear a una pantalla para distraerse un momento o para vernos reflejados como los sobrevivientes de nuestro propio Apocalipsis, incluso, por qué no, como los héroes de nuestra propia historia, tal y como lo dijo Bowie “we can be heroes, just for one day”.



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