APRO/Eric Pacheco Beltrán
El gobierno de Querétaro no sólo ocultó las camas para enfermos con Covid-19 para evitar que le enviaran pacientes de la Ciudad de México y el Estado de México, también prepararon una estrategia jurídica para evitar recibirlos.
Recientemente el secretario de Salud de Querétaro, Julio César Ramírez Argüello, confesó que optaron por falsear los datos al Gobierno Federal sobre el número de camas reales disponibles para pacientes Covid-19 y dejarlas para los queretanos: “Hace cuatro o cinco semanas, cuando empezó a subir mucho en la Ciudad de México y en el Estado de México la cifra de pacientes hospitalizados, decidimos no publicar algunos números de camas, pensando en que nos fueran a traer pacientes al estado”.
Tras la polémica, el funcionario salió a decir que ofrecía una disculpa “si fui impreciso en mis palabras o di lugar para que se malinterpretaran”.
Sin embargo, en otra grabación con medios de comunicación realizada desde abril, la directora de Servicios de Salud, María Martina Pérez Rendón, reconoció que esa Secretaría de Salud tenía la instrucción de evitar que les enviaran pacientes de hospitales de fuera.
“En el caso de la Secretaría de Salud, en ese sentido estamos instruidos, de trabajar para que los espacios y, de acuerdo a las proyecciones, justifiquemos plenamente que no podemos recibir pacientes de otro ámbito”.
No obstante, aclaró que si bien en la Secretaría de Salud tenían esa instrucción, faltaba revisar la parte de los hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que operan en Querétaro.
Al respecto, el gobernador Francisco Domínguez Servién, quien participó en esa conferencia, agregó que estaban analizando una estrategia jurídica para evitar, incluso, el envío de pacientes a través del IMSS.
“No es que nos manden y no quisiéramos dejarlos entrar, sino que nuestra curva hasta el día de hoy, según los especialistas la tenemos achatada, el que me migren de otros estados se pudiera complicar”.
Por ello, aseguró que en dado caso de que se saturaran o colapsaran los hospitales de la Ciudad de México, el Estado de México o cualquier otro estado, solicitaría como gobernador que no se enviaran pacientes.
“Se mantienen y se pagan con cuotas precisamente de los empresarios, comerciantes, industriales queretanos, ellos son los que mantienen el seguro social de Querétaro y yo pediría que fueran para los queretanos”.
Tras la reciente confesión de que ocultaron las camas al Gobierno Federal, la directora de los servicios de Salud justificó que carecían de una clave para reportar la totalidad de las camas, por lo que ahora cuentan con 234 camas con ventilador y 90 ventiladores extras, por si se requieren para habilitar otro espacio.