- Con la entrada del T-MEC las empresas del país experimentarán un proceso de mejora, no sólo salarial, sino del apego a reglas laborales internacionales
A pesar de los serios trastornos de la economía global, en los sectores productivos existe optimismo sobre una pronta recuperación, consideró Jesús Enrique Ramírez Pérez, líder de la CROM en Aguascalientes al apuntar sobre los beneficios esperados del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Explicó que con la entrada en vigor del acuerdo comercial desde el 1 de julio, las empresas del país, principalmente las ligadas al sector exportador, experimentarán un proceso de mejora, no sólo salarial, sino del apego a reglas laborales internacionales.
El acuerdo comercial implica, dijo, la exigencia de la mejora en la calidad de los trabajos que generen las inversiones extranjeras en sectores clave para las economías de los tres países, como el automotriz.
Destacó que habrá paneles internacionales laborales en donde se podrán ventilar irregularidades. “Ya no solo estará la junta federal de conciliación sino que habrá instancias internacionales de rápida respuesta para ayudar a dirimir diferencias entre el gobierno, las empresas y los trabajadores, destacó Ramírez Pérez, como uno de los avances sustantivos del acuerdo.
Otro aspecto fundamental será el hecho de que, en el caso del sector automotriz, los componentes de un vehículo armado en cualquiera de los tres países, deberá tener un contenido nacional del 75%, anteriormente era del 62.5%, y para el caso de México, obligará a que las empresas del sector automotriz, expandan aún más sus inversiones, generen más empleos, porque tendrán que fabricarse en el país, un número mayor de autopartes.
Destacó que, si bien, los primeros beneficiados con estas nuevas reglas laborales serán los trabajadores de sectores de exportación, esta nueva cultura de pagar mejores salarios, de generar condiciones laborales más dignas y una vida sindical de respeto a la determinación de los propios trabajadores, permeará a otros sectores y a las empresas mexicanas.
CROM