Obcecados. Contra lo que parece, los miembros de la LXIV Legislatura de Aguascalientes, todos, sí tienen un propósito claro y lo están consiguiendo: desprestigiar la tarea de un legislador, dejar por los suelos la reputación de los diputados, que se retire la H de honorable al Congreso del Estado para siempre, tras la elección de Francisco Muñoz como auditor superior, a pesar de ser de la terna el perfil menos adecuado, su nombramiento como titular del Osfags a pesar de todas las voces que exigían reponer el proceso de elección, evidencia que los diputados no tienen la menor relación con la transparencia, la rendición de cuentas, tampoco quieren escuchar a la ciudadanía, mucho menos eso tan necesario que llaman parlamento abierto para definir un cargo de tal importancia. Lo suyo, como ya dijo Gustavo Báez, es pasar a la historia como sea, y parece que el segundo objetivo es hacerlo como la peor legislatura del siglo XXI, por eso decimos que sí tienen propósito y lo están cumpliendo, pero seguramente, al igual que el 2020 tienen todavía muchas sorpresas para todos, pues ya están pensando en una sesión extraordinaria. Dios nos agarre confesados y vestidos, pues además es evidente que los deshonorables permiten hacer de su ejercicio el campo de batalla de los panistas divididos en dos bandos, y el resto nomas de espectador porque no llegan a oposición; dicen que ayer ganó la alcaldesa.
Voto. La elección de Francisco Martín Muñoz Castillo fue por cédula, ese voto secreto que en un papelito los diputados depositan en una urna, los resultados que colocan a Muñoz Castillo al frente del Osfag, nos dicen, es que obtuvo una “amplia mayoría”, 23 de un total de 27 votos, 23 diputados votaron por él, cuatro a favor de Javier Quezada Mora y nadie por Yolitzin Rodríguez Zendejas, de acuerdo a un gráfico difundido por La Verdad del Centro, del que no se puede comprobar su veracidad, los cuatro votos en contra del nuevo titular del Osfags fueron de diputados de Morena, obvio, pero también del PAN, ese gráfico indica que los morenitas José Manuel González Mota y Cuauhtémoc Cardona Campos votaron por Javier Quezada Mora, al igual que los panistas Karina Ivette Eudave Delgado y Gustavo Báez Leos… qué vergüenza, por donde se le vea, en serio, son una vergüenza los diputados, los que obedecen a las instrucciones de su grupo en el gobierno y también esos que se declaran oposición, pero a la hora de la hora, votan como se los indica el pastor del rebaño.
No entiende. Apenas el 18 de mayo la Red Feminista para la Transformación, es decir, las simpatizantes y militantes de Morena, publicaron una carta abierta dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador donde lo instan respetuosamente a comprender que “como Gobierno en el poder debemos comprender que el trasfondo de la violencia contra mujeres y niñas no es la delincuencia común o la descomposición social sino el sistema patriarcal machista”, y le señalan que “La familia mexicana, como institución que es, se encuentra enculturizada en el machismo y la misoginia y como institución que es también fue rota y corrompida por la voracidad de la larga noche neoliberal como el resto de instituciones, esa es una realidad que las cifras nos demuestran. Reconocer esto, así como las condiciones de injusticia de género es apenas el primer paso”. ¿Y qué hizo López Obrador con este exhorto? Nada. Qué se puede esperar del presidente si ni a sus compañeras de partido escuchó, menos a las feministas que le exigen exactamente lo mismo.
Viva la familia. Ayer, el presidente reiteró sus creencias sobre la familia, lo que ya había dicho y se le había demandado justo al inicio de la pandemia, ahora en Texcoco, Estado de México, uno de los lugares con más feminicidios del país: las mujeres cuidan a sus padres porque los hombres son “desprendidos”. “A veces no gusta mucho porque, también con razón, se quiere cambiar el rol de las mujeres y eso es una de las causas, es una de las causas justas del feminismo, pero la tradición en México es que las hijas son las que más cuidan a los padres, nosotros los hombres somos más desprendidos, pero las hijas siempre están pendientes de los padres, de los papás, de las mamás. Entonces, cuidamos, por tradición, por costumbre, porque la familia mexicana es la institución más importante de seguridad social que existe, es familia fraterna”. López Obrador es el típico macho que no ve, no escucha, no comprende la exigencia de las mujeres del país que gobierna, las hace a un lado. Esta misma semana empujó a tres de las titulares de su gabinete a renunciar. López Obrador es irresponsable no sólo por perpetuar los roles de género, sino porque en lo que lleva de mandato no ha escuchado la exigencia de las mujeres a una vida libre de violencia y que siguen sin ver la cuarta transformación prometida. Es ese típico hombre de “izquierda” que pelea por las clases sociales pero desprecia la causa de las mujeres, la que le carga el fusil, la que se queda en casa a atender doméstica y sexualmente a su marido, a cuidar a los ancianos y a los niños. El discurso de la familia como la institución “más importante de seguridad social que existe” es falsa porque no hay programas para sustentar esto desde la movilidad, la economía, la seguridad, suena bien hablar de la familia, ese mismo discurso lo tienen los conservadores y los panistas que tanto señala, pero a todos se les olvida que esa misma institución romantizada es una fuente de explotación, de opresión y de violencia para niños, niñas y mujeres, no porque los hombres sean “desprendidos”, sino porque se continúan perpetuando los estereotipos de género, lo que hizo ayer López Obrador. Esa institución familiar es la que lleva semanas enteras en un plantón afuera de Palacio de Gobierno, familias enteras esperando ser atendidas por el presidente, familias de mujeres víctimas de feminicidios, que con pintas en el suelo, cruces rosas, letreros y consignas buscan llamar la atención de ese irresponsable y “desprendido” presidente de México. Victoria Delgadillo Romero, madre de una víctima de feminicidio señaló: “Nosotros estamos pidiendo que lo dé a conocer Andrés Manuel López Obrador públicamente, en la mañanera, ya que no nos recibió, al menos que lo haga público, las decisiones y los compromisos que tiene con los familiares de los desaparecidos”, otra de las madres, Eleucalia Matilde Bermúdez relata: “Me gustaría que tuviéramos una entrevista con Beatriz Müller, la señora presidenta, creo que ella sería más sensible, como ella es madre. Ella entendería mi dolor y mi tristeza”. Qué vergüenza de gobierno.
La del estribo. Tápese los ojos, porque lo vamos a escribir tal y como lo pensamos: ayer, Hugo López-Gatell se dedicó a vernos la cara de pendejos, durante un largo tramo de su conferencia demostró que él había predicho que la pandemia sería larga, cosa que nadie pone en duda, y habló de sí mismo en tercera persona para presentar un clip de video donde el subsecretario repetía lo mismo… claro, omitió al conferencia en la que vaticinó que el 25 de junio finalizaría la pandemia, enfrente del presidente, escrito en una de sus láminas. Ya no nos quedan insultos para López-Gatell, sólo tenemos un tristísimo silencio por las más de 25 mil personas a las que no volveremos a abrazar… Ánimo, a pesar del gobierno, de los gobiernos, es todo lo que le podemos desear, y prometer que acá nos leeremos el lunes.
@PurisimaGrilla