El descuido afuera de los bancos, donde la pandemia apremia a la necesidad - LJA Aguascalientes
24/11/2024

  • Los días de paga, 15 y 30, siempre convierten a las instituciones bancarias en un punto alarmante donde no se sabe si alguien podrá contraer el nuevo Covid-19
  • Afuera de los bancos, cientos de personas que precisan cobrar su sueldo, se aglomeran; sin espacio, buscan y comparten sombra

***

Como se ha visto, la pandemia por coronavirus no exime edades, nacionalidad, altura, peso, grado de educación, ideología política, sexualidad, género, a todos llega. Sin embargo, sí es más letal en ciertos grupos con particularidades clínicas, por ejemplo, aquellos que tienen inmunodepresión, aquellos que tuvieron un trasplante de órganos, aquellos con tabaquismo, obesidad, diabetes, hipertensión, entre otras. De la misma forma, existen también las personas que están más expuestas al virus: desde la obviedad, el cuerpo médico, pero también están las personas que tienen que trabajar fuera y cobrar sus quincenas para sobrellevar las próximas dos semanas. Y personas que necesitan forzosamente ir a formarse al banco y aclarar sus cuentas con el ejecutivo o retirar personalmente el dinero para poder disponerlo.

Los días de paga, 15 y 30, siempre convierten a las instituciones bancarias en un punto alarmante donde no se sabe si alguien podrá contraer el nuevo Covid-19, porque, si bien dentro todos los bancos acatan estrictamente las medidas de Sana Distancia, piden cubreboca, usan caretas y dan gel antibacterial, es afuera donde la gente involuntariamente y con descuido se juntan una con la otra.

En las banquetas aledañas a los bancos existen marcas en el suelo para que se respete la Sana Distancia promovida desde las trincheras federales, no obstante, a plena tarde y con la inclemencia del sol, cientos de personas buscan sombra y tienden a juntarse, casi encima del otro, para compartir ese respiro común de esperar durante horas el poder ser atendido por un cajero o un ejecutivo. Testimonios anónimos declararon a este medio que llevaban hasta dos horas aguardando su turno; dos horas indefinidas en la que gente constantemente se abría paso entre la gente; dos horas indefinidas en las que el cubreboca pierde sentido y se guarda en la bolsa hasta que se los pidan al momento de entrar; dos horas indefinidas en las que la Sana Distancia sólo parece un spot de radio, un anuncio en la televisión o una crítica en la prensa escrita; dos horas indefinidas en las que también cientos de personas entran y salen de los cajeros automáticos que todos comparten y que escasean de gel antibacterial.

No todos los ciudadanos pueden arreglar sus querellas con las instituciones bancarias a través de servicios de atención digitales, telefónicos o por medio de aplicaciones de vanguardia. Ese es el caso de Francisco -quien prefirió guardar su apellido-, una de las numerosas personas que aguardó una hora afuera del Banamex ubicado en la Avenida Madero, que compartía sombra y dudas con muchos otros. Francisco tiene 66 años de edad y problemas de hipertensión, aún siendo parte de uno de los grupos más vulnerables por su condición de tercera edad y presión arterial alta, tiene que acudir al banco a que le aclaren detalles en sus cuentas porque no sabe usar los servicios tangentes que ofrece el banco. Se pone en riesgo de contagio para poder disponer de los recursos que lo ayudarán a sobrellevar sus finanzas durante otros quince días, y así, sucesivamente. Sale con miedo y con penuria.

La pandemia por sí sola demuestra la desigualdad social, el acceso a la educación, la educación efectiva, las verdaderas necesidades, las malas costumbres, y siempre habrá un sector más vulnerado que otro. Cada día 15 y 30 es visible afuera de los bancos.


Show Full Content
Previous Semáforos inteligentes para Segundo Anillo en el oriente y norte de la ciudad de Aguascalientes
Next Pretender que el Ejército realice labores de Seguridad Pública habla de autoritarismo
Close

NEXT STORY

Close

Sheinbaum niega “militarización” con la reforma sobre la GN

20/09/2024
Close