- La TD fue de 3.5% de la PEA, misma tasa que la reportada en el trimestre inmediato anterior
- La Población Subocupada alcanzó 4.7 millones de personas
- La Población Ocupada Informal sin seguridad social fue de 31 millones de personas, es decir, aumentó en 0.8% respecto al mismo lapso de 2019 y representó 56.1% de la población ocupada
- La desocupación en los hombres aumentó 0.1 puntos porcentuales y en las mujeres se mantuvo sin cambio
El Inegi presenta los resultados trimestrales de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) para el trimestre enero-marzo de 2020:
Población económicamente activa
Durante el periodo enero-marzo del año en curso, la población de 15 años y más disponible para producir bienes y servicios en el país fue de 57.3 millones (59.9% del total), cuando un año antes había sido de 56 millones (59.5%). El aumento de 1.3 millones de personas fue consecuencia tanto del crecimiento demográfico, como de las expectativas que tiene la población de contribuir o no en la actividad económica. Mientras que 76 de cada 100 hombres en estas edades son económicamente activos, en el caso de las mujeres, 45 de cada 100 están en esta situación. Las comparaciones entre el primer trimestre de 2019 e igual lapso de este año de la Población Económicamente Activa y su división en población ocupada y desocupada se muestran en el siguiente cuadro:
Población ocupada
Al interior de la PEA es posible identificar a la población que estuvo participando en la generación de algún bien económico o en la prestación de un servicio (población ocupada), la cual en el primer trimestre de 2020 alcanzó 55.4 millones de personas (33.5 millones son hombres y 21.9 millones son mujeres), cantidad superior en 1.2 millones de personas a la del mismo periodo de un año antes.
Prácticamente la mitad de la población ocupada (49.9%) se concentra en las ciudades más grandes del país (de 100 mil y más habitantes y/o capitales de estado); le siguen las localidades rurales (menores de 2 500 habitantes) donde se agrupa 20.8% de la población ocupada total; los asentamientos que tienen entre 15 mil y menos de 100 mil habitantes (urbano medio) albergan 15%, y finalmente, el resto de los ocupados (14.3%) residen en localidades de 2 500 a menos de 15 mil habitantes (urbano bajo).
Por sector de actividad
Al considerar a la población ocupada con relación al sector económico en el que labora, 6.6 millones de personas (11.9% del total) trabajan en el sector primario, 13.8 millones (24.9%) en el secundario o industrial y 34.6 millones (62.6%) están en el terciario o de los servicios. El restante 0.6% no especificó su actividad económica. Los montos correspondientes que se presentaron en el periodo enero-marzo de 2019 fueron de: 6.6, 13.7 y 33.6 millones de personas, en el mismo orden.
Por posición en la ocupación
Si se observa a la población ocupada en función de la posición que guarda dentro de su trabajo, se tiene que poco más de dos terceras partes del total (68.6%), esto es, 38 millones son trabajadores subordinados y remunerados; 12.4 millones (22.5%) trabajan por su cuenta, sin emplear personal pagado; 2.7 millones (4.9%) son propietarios de los bienes de producción, con trabajadores a su cargo y 2.2 millones (4%) son trabajadores que no reciben remuneración (ver gráfica 3).
De las anteriores categorías se desprende que los trabajadores subordinados y remunerados se incrementaron en 1.1 millones de personas entre el primer trimestre de 2019 e igual periodo de 2020, los trabajadores por cuenta propia aumentaron en 164 mil personas y los empleadores en 137 mil personas, en tanto que los trabajadores no remunerados disminuyeron en (-)211 mil personas.
Algunas otras condiciones de trabajo
La población ocupada desempeña una gran variedad de tareas que realiza con distinta intensidad: mientras que por un lado el 6.1% de las personas trabaja menos de 15 horas semanales, en el otro extremo se ubica un 27% que labora más de 48 horas semanales. En promedio, la población ocupada trabajó en el trimestre enero-marzo de este año jornadas de 43 horas por semana.
Otro enfoque desde el cual puede caracterizarse a la población ocupada es el que se refiere al tamaño de la unidad económica en la que labora. En función de ello, si sólo se toma en cuenta al ámbito no agropecuario (que abarca a 46.7 millones de personas) en el primer trimestre de 2020, 22.5 millones (48.2%) estaban ocupados en micronegocios; 8.5 millones (18.2%) lo hacían en establecimientos pequeños; 5.4 millones (11.5%) en medianos; 5.2 millones (11.1%) en establecimientos grandes, y en otro tipo de unidades económicas se ocuparon 5.2 millones (11.1%).
Entre el trimestre enero-marzo de 2019 y el mismo lapso de 2020 la población ocupada en el ámbito no agropecuario creció en 1.3 millones de personas, siendo en los micronegocios donde se registró el incremento más significativo, con 631 mil personas, le siguieron los pequeños establecimientos con 453 mil personas, otro tipo de unidades económicas con 282 mil personas y los grandes establecimientos con 102 mil personas.
Trabajadores subordinados y remunerados
Del total de los trabajadores subordinados y remunerados, el 8.2% se desempeñó en el sector primario de la economía, 27.7% en el secundario y 63.4% en el terciario, quedando sin especificar el 0.8% restante, en el trimestre que se reporta. Un total de 20.8 millones de estos trabajadores, que constituyen el 54.8% del total, tienen acceso a instituciones de salud como prestación por su trabajo; esta cifra fue superior en 789 mil personas a la observada en el primer trimestre del año pasado. A su vez, disponen de un contrato por escrito 20.3 millones (cantidad que creció en 677 mil personas frente a la de igual trimestre de 2019) y 17.2 millones no cuentan con el mismo.
Población subocupada
Otra forma de caracterizar a la población ocupada es en función de su condición de subocupación, entendida ésta como la necesidad de trabajar más tiempo, lo que se traduce en la búsqueda de una ocupación complementaria o de un nuevo trabajo con mayor horario. Al respecto, durante el trimestre de referencia la población subocupada en el país fue de 4.7 millones de personas y representó 8.5% de las personas ocupadas, tasa superior a la de 6.8% del trimestre enero-marzo de un año antes (véase gráfica siguiente).
Al eliminar el factor estacional, la tasa de subocupación como proporción de la población ocupada se incrementó 0.8 puntos porcentuales en el primer trimestre de 2020 frente al trimestre inmediato anterior.
Informalidad laboral
El empleo informal, o medición ampliada de informalidad, añade a la definición de trabajo informal las siguientes categorías: el trabajo no protegido en la actividad agropecuaria, el servicio doméstico remunerado de los hogares, así como los trabajadores subordinados que, aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen bajo modalidades en las que se elude el registro ante la seguridad social. Así, la medición de la ocupación en el sector informal se considera el punto de partida y un componente del cálculo de una medida más amplia: el empleo informal. Los resultados de la ENOE indican que, en el primer trimestre del presente año todas las modalidades de empleo informal sumaron 31 millones de personas, es decir, éste aumentó en 0.8% respecto al mismo lapso de 2019 y representó 56.1% de la población ocupada (Tasa de Informalidad Laboral 1). De manera detallada, 15.3 millones conformaron específicamente la ocupación en el sector informal , cifra que significó un incremento de 1.6% a tasa anual y constituyó 27.6% de la población ocupada (Tasa de Ocupación en el Sector Informal 1); 7.8 millones corresponden al ámbito de las empresas, gobierno e instituciones; 5.7 millones al agropecuario y otros 2.3 millones al servicio doméstico remunerado.
De acuerdo con datos desestacionalizados, la tasa de informalidad laboral 1 retrocedió (-)0.2 puntos porcentuales en el primer trimestre de 2020 respecto al trimestre previo, mientras que la tasa de ocupación en el sector informal 1 se mantuvo sin variación en la misma comparación.
Población desocupada
La ocupación muestra distintos grados de intensidad según sea la perspectiva desde la cual se le observe. Una de éstas, es la que se refiere a la población con trabajo cero que se ubica entre la población ocupada y la no económicamente activa; es decir, población desocupada, la cual no trabajó siquiera una hora durante la semana de referencia de la encuesta, pero manifestó su disposición por hacerlo e hizo alguna actividad por obtenerlo. En el trimestre enero-marzo del año en curso la población desocupada en el país se situó en 2 millones de personas y la tasa de desocupación correspondiente (TD) fue de 3.4% de la PEA, mismo porcentaje que el de igual trimestre de 2019. Al estar condicionada a la búsqueda de empleo, la tasa de desocupación es más alta en las localidades grandes, en donde está más organizado el mercado de trabajo; es así que en las zonas más urbanizadas con 100 mil y más habitantes la tasa llegó a 4.3%; en las que tienen de 15 mil a menos de 100 mil habitantes alcanzó 3%; en las de 2 500 a menos de 15 mil fue de 2.7%, y en las rurales de menos de 2 500 habitantes se estableció en 2.2 por ciento.
Según cifras desestacionalizadas, en el primer trimestre de este año la TD en el ámbito nacional se ubicó en 3.5%, misma tasa que la del trimestre inmediato anterior. La desocupación en los hombres aumentó 0.1 puntos porcentuales y en las mujeres se mantuvo sin cambio.
La ocupación en las entidades federativas
Además de registrar de manera permanente el comportamiento del empleo en el ámbito nacional y para los cuatro tamaños de localidades a los que se acaba de hacer referencia, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo proporciona información para las 32 entidades federativas. De esta forma se puede conocer la complejidad del fenómeno ocupacional en un nivel de desagregación más detallado.
Población no económicamente activa
La población no económicamente activa (PNEA) agrupa a las personas que no participan en la actividad económica ni como ocupados ni como desocupados. En el primer trimestre del año en curso, 38.5 millones de personas, equivalentes al 40.1% del total de la población de 15 años y más, integraban este sector, del cual 32.7 millones declararon no estar disponibles para trabajar debido a que tenían que atender otras obligaciones, o tenían interés, pero se encontraban en un contexto que les impedía poder hacerlo (tiene impedimentos físicos, obligaciones familiares o están en otras condiciones). Por su parte, 5.8 millones se declararon disponibles para trabajar, pero no llevaron a cabo acciones al respecto, por lo que se constituyen en el sector que eventualmente puede contribuir en el mercado como desocupado u ocupado.
Inegi