- Luego del Hackeo el RPPyC llegó la emergencia sanitaria por Covid-19
- Existe incertidumbre en el sector en continuar o no con los proyectos
La pandemia del Covid-19 afecta a los constructores de la vivienda en Aguascalientes que se mantienen en incertidumbre de emprender o no nuevos proyectos, dar continuidad a los actuales, aunado al freno de la prospectación y con ello la venta de casas hasta en un 50 por ciento que provocó el hackeo al Registro Público de la Propiedad y Comercio (RPPyC), informó Antonio Rodríguez Mirelles, presidente local de la Cámara Nacional de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).
El líder de los desarrolladores inmobiliarios reconoció que el sector en el ámbito estatal sufrió un doble impacto, luego de que apenas tomaban un respiro con el restablecimiento de los servicios del RPPyC cuando casi de inmediato llegó la emergencia sanitaria por el coronavirus
“Nos ha impactado en diferentes formas: la incertidumbre de qué va a pasar si le metemos velocidad a los proyectos vigentes, si le bajamos la velocidad, si los mantenemos, cada quien estamos tomando la decisión que nos conviene y también con los nuevos proyectos, si los detenemos o ya podemos empezar”, explicó el desarrollador.
Además de los anterior, como toda empresa, es necesario contar con liquidez para sostener los proyectos, ante la dificultad de aguantar cuatro semanas o hasta dos meses sin poder cobrar, ya que todos los proyectos se están alimentando del flujo de efectivo.
Explicó que con la pandemia, que obliga a que las personas permanezcan en casa, obviamente no van a ver las casas que se ofertan al ser conocido que “de la vista nace el amor”, además de que, si algún vendedor traía algún cliente, la venta se cae ante la incertidumbre de la economía; todo esto ha frenado las ventas.
“Nos ha impactado dos situaciones, una tras otra, primero el cierre del RPPyC, eso es local apenas estábamos saliendo a tomar aire y ¡pum! Estamos bastante maltrechos, pero con mucha dignidad y con mucho entusiasmo, queremos salir adelante y estamos haciendo lo mejor de nosotros para salir adelante”.
El empresario reconoció el esfuerzo de los encargados de dependencias como la Seguot y del RPPyC, quienes, a pesar de lo grave de la situación de hace dos meses, hicieron un gran esfuerzo porque todo volviera a la normalidad y salgan los documentos, como los certificados de libertad de gravámenes.
–¿Se puede medir el impacto económico del cierre del RPPyC y ahora con la pandemia?
–Es complicado, porque tendríamos que valorar a cada empresa, a lo mejor que ya estaba por cerrar casas de buen valor y no le afectó porque pudo haber cobrado anticipado.