Decepcionante, no hay más, para calificar de otra manera la presentación del programa emergente para el bienestar y el empleo que ayer hiciera el presidente Andrés Manuel López Obrador, para tener una opinión distinta habría que ser John Ackermann, Irma Eréndira Sandoval o algún bot deschavetado al servicio de Jesús Ramírez Cuevas, porque desde donde se le vea fue un fracaso, no se anunció ninguna medida, repitió todos los lugares comunes en que basa el rotundo éxito de la Cuarta Transformación. No sólo eso, empecinado en darle lustre a la investidura pero respetando las reglas de la sana distancia, López Obrador rindió un discurso ante nadie (excepto algunas cámaras) y lo que proyectó fue justo lo contrario a lo que se necesita: un presidente solo, aislado, grandilocuente, acostumbrado a dirigirse a sus masas y lento al reaccionar ante el silencio.
¿Exageramos? Usted considere, apenas la semana pasada, tras la entrega al Congreso de la Unión los “Pre-Criterios 2021”, con las perspectivas económicas y de finanzas públicas para el cierre de este año y el ejercicio fiscal del próximo año, comenzaron a correr los rumores de que el presidente renunciaría a Arturo Herrera, porque el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público se atrevió a presentar datos diferentes a los que el presidente tenía, en redes comenzaron a realizar los enroques, aprovechando que el canciller Marcelo Ebrard Casaubon, se apropió de una de las conferencias del subsecretario Hugo López-Gatell y leyó el decreto presidencial en que se declaraba la Emergencia Sanitaria, dejaban fuera a Olga Sánchez Cordero de Gobernación y colocaban en ese puesto al actual secretario de Relaciones Exteriores.
Desencuentros. No sólo los rumores de que renunciaría a Arturo Herrera y otros cambios en el gabinetito, a eso hay que sumar los desencuentros que tuvo con el sector empresarial, no sólo con el presidente nacional de Coparmex, Gustavo de Hoyos, también con el siempre aliado de la Cuarta Transformación, Carlos Salazar Lomelín, quien tras reunirse con López Obrador, nomás le alcanzó para decir que la única oferta que tenía el Gobierno Federal para el sector privado, era salvar el mes, y que el presidente insistió en que no haría caso de las recomendaciones de los empresarios, ni salvaría empresas, ni fobaproas, ni nada…
Domingo 7. Así llegó el esperado domingo en que, aprovechando los informes trimestrales que se inventó, López Obrador hizo gala de su necedad, divagando solo en un patio de Palacio Nacional para no ofrecer absolutamente nada nuevo. El presunto programa emergente para el bienestar y el empleo resultó una reiteración de la única forma en que el presidente cree que se puede generar riqueza: regalando dinero a sus seguidores, distinguiendo en sectores como el mago de marketing que es.
El programa. ¿No es cierto?, va el resumen del programa de López Obrador: Entrega adelantada de las pensiones para adultos mayores y ampliar el programa Sembrando vida; eso es todo, lo demás fueron promesas: no aumentar los precios del combustible, eliminar el aguinaldo a servidores públicos desde subdirectores hasta el presidente, y crear en nueve meses 2 millones de empleos. Sí, faltó enumerar algunas cosas, como los apoyos a vivienda, los créditos para pequeñas empresas, mejorar la infraestructura de algunas escuelas… entre otras medidas que ya estaban anunciadas.
Reacciones. Antes de pasar a la desmesura de prometer crear 2 millones de empleos en nueve meses, un comentario necesario sobre la atención que despiertan la no primera dama Beatriz Gutiérrez Müller, la ex primera dama, Angélica Rivera, o la politóloga Denise Dresser cada que lanza una crítica contra el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, es sólo una prueba del machismo y misoginia que sigue y seguirá en las redes sociales, porque no importa de quién se trate, las mujeres serán el canal perfecto para volcar la podredumbre de quienes defienden o atacan a la 4T. Ayer lo vimos nuevamente después del informe de López Obrador, toda la tarde el tema principal fue comparar a Angélica Rivera con Beatriz Gutiérrez, después de que esta última “defendiera”, si así le podemos decir a su contestación, a su marido. Desde el grado académico hasta la alcoba, los “periodistas de las redes”, concedería López Obrador, se encargan de agredirlas y agredirse, todo esto en franca desobediencia con lo solicitado por el líder de la nación, que oooootra vez terminó su discurso con el llamado a sus típicos abrazos, pero que en la realidad no se replican ni hacen eco entre la población porque para cambiar las formas sociales son necesarios programas concretos, planes, estudios, no palabras al aire como que “vamos a salir de nuevo a las calles, sin miedos ni temores”, algo que tampoco pasa en la realidad ni en el ciberespacio, pues la violencia contra las mujeres no se detiene ni en temporada de contingencia. Un ejemplo de esto ocurrió en Nogales, Sonora, donde fue violada y asesinada en su casa Ana Paola, de 13 años, mientras su mamá fue a comprar víveres para continuar con la cuarentena en casa, ¿nos resulta increíble? Por desgracia no, terrible sí, detestable, abominable, pues, ni en los discursos ni en las acciones el gobierno de la 4T ha hecho prácticamente nada para proteger a las mujeres de este país de los feminicidios, palabra que el mismo López Obrador se niega a pronunciar: feminicidio. Otra muestra de que México no es ni será el pueblo digno, libre y feliz, es la actuación de la FGR, otra que también repudia el término, pues de su cuenta de Twitter salieron a la “defensa”, otra vez, si quiere decirle así, del presidente, dirigido contra una jovencita que con justa razón se sintió amedrentada por quien maneja la cuenta institucional de la Fiscalía que debería ser autónoma, y pues no, no vemos claro el camino que sigue esta 4T para transformar a México, para “seguir siendo”, dice el presidente, “libres, prósperos, fraternos, humanos”, cuando las mujeres ni en el mundo virtual ni en sus casas pueden existir libres de violencia… ¿Cortina de humo?, ¿a quién le conviene seguir invisibilizando la creciente violencia de género?, ¿a qué imbécil le parece más relevante hacer un concurso de quién es la damita más damita cuando el presidente sale a engañarnos?
El engaño. ¿2 millones de empleos en nueve meses? No, imposible, no bastan la fe en la Cuarta Transformación, ni las citas de Franklin Delano Roosevelt o de Simón Bolívar, nada de lo que haga Andrés Manuel López Obrador, sin voltear a ver a la sociedad, sin considerar a los millones que viven en la informalidad, sin tender la mano a los millones que viven al día… nada logrará que la maquinaria genere empleos, nada, los mismos números del presidente, en los que sí confía, demuestran que no se está logrando el objetivo, que en su mejor momento sólo se podría alcanzar, de acuerdo a la tendencia, un millón de empleos. Mentiroso, y eso sin considerar que prometió que su mano limosnera tocaría con sus apoyos al 100 por ciento de los pobres del país… Estamos absolutamente solos.
La del estribo. De pena ajena el actuar de policías de Calvillo, pues sin razón alguna, y por el solo hecho de que dos turistas franceses estaban sentados en una banca del Andador Centenario, comiendo, con todo el desconocimiento de su reglamento, pretendieron llevarse detenido a uno de ellos con uso de la fuerza, solo a uno, mientras que el otro exigía explicaciones ante la molestia de que este hecho lo atribuía al color de piel de su amigo. ¿no saben en serio la gravedad de los actos de discriminación? El video se extendió cual rápidas son las redes, a lo que de inmediato (ahora sí el área de comunicación social trabajó rápidamente), se dio a conocer un comunicado en donde el gobierno municipal de Calvillo, “ofrece una sentida disculpa a los ciudadanos afectados por el uso indebido de la fuerza pública”. Ojalá que los ciudadanos afectados acepten las disculpas -y no vayan a acusarlos ante la Conapred por discriminación y a Derechos Humanos por uso indebido de la fuerza pública- y los elementos policiacos reciban, además de una sanción, una fuerte capacitación de cuáles son sus atribuciones y en qué momento pueden hacer uso de la fuerza pública, pues sólo bastaba con que conminaran a los jóvenes a resguardarse en el lugar donde se hospedan, como parte de las medidas sanitarias de protección de contagio del Covid-19, no pretender arrestarlos.
@PurisimaGrilla
