- A pesar de recomendaciones, en Catedral se llevaron a cabo misas abiertas en donde canónigos y fieles asistieron sin diferencia alguna
- En el decreto emitido el 27 de marzo por el obispado se suspendieron las misas con asistencia de fieles; en otro comunicado se dijo que las misas y celebraciones en relación con Semana Santa no serían públicas, aun así, fieles acudieron a dichas celebraciones
El fin de semana pasado se dieron los asuetos por Semana Santa. Al respecto, autoridades de los tres órdenes de gobierno pidieron a la ciudadanía resguardarse en casa, puesto que es común que en esos días se aglomeren personas en eventos de celebraciones religiosas. Contrario a las recomendaciones de no salir ante la emergencia sanitaria causada por el Covid-19, desde el jueves 9 de abril se estuvieron llevando a cabo algunas misas, que si bien nunca se suspendieron como tal, sí reunían a más de las 50 personas que la Federación recomendaba evitar.
El 11 de abril también se celebró la vigilia pascual con la ceremonia del Fuego Nuevo y, posteriormente, el domingo 12 se llevaría a cabo una misa en la catedral de la ciudad, misma que sería predecesora de la Consagración a la Virgen de Guadalupe, realizada por el Obispo José María de la Torre Martín.
En la circular número 220 emitida por la Diócesis de Aguascalientes se comunicó lo siguiente: “Al concluir la misa de 10:00 a.m. en Catedral, después de un toque solemne de campanas, realizaré como Obispo de esta Diócesis, esta consagración. Les pido a los sacerdotes que también lo hagan en las Misas que celebren, inviten a todos los fieles para que a su vez puedan hacerlo desde sus hogares.”
Aunque en el comunicado sí se hizo un exhorto a que cada fiel hiciera lo propio en casa, la realidad es que muchos asistieron al evento presencial, dejando de lado las recomendaciones de aislamiento y distancia social emitidas por los gobiernos y hasta por el mismo obispado.
También el 27 de marzo el obispado lanzaría un decreto en el que se suspendían las misas con asistencia de fieles a partir del lunes 30 de ese mes (hace más de una semana), quedando exentos de ese precepto los miembros de los monasterios y de comunidades religiosas. En un comunicado emitido ese mismo 27 de marzo se hicieron las siguientes determinaciones con respecto a las recomendaciones para prevención del coronavirus en Semana Santa:
“Las celebraciones propias de Semana Santa, se celebrarán en el interior de los templos, sin que sean celebraciones públicas, utilicen las respectivas formas previstas en el Misal Romano, omitan los ritos como lavatorio de pies, beso a la santa cruz, etcétera.
La Misa Crismal se celebrará como de ordinario el Jueves Santo a las diez de la mañana con la participación única de los Canónigos, los Vicarios Episcopales y los Decanos”.
¿De qué privilegios goza el Obispo de #Aguascalientes ante la autoridad, que puede retarlos y no seguir las recomendaciones que se han emitido desde hace semanas? @GobAgs @GobiernoMX @MunicipioAgs @CEDH_Ags @CNDH @SomosLJA @lopezdoriga @Pontifex_es @nacholozano @CarlosLoret pic.twitter.com/nRdLo6wO78
— NORMA ZAMORA (@normazamorar9) April 12, 2020
Aún y cuando iglesia y gobiernos hicieron recomendaciones en relación a la prevención y no aglomeración de gente para evitar posibles contagios por contacto de coronavirus, ni la Iglesia ni los gobiernos ayudaron a una regulación en la entrada de las misas que se celebraron; los fieles a la Iglesia católica asistieron aunque se les recomendó quedarse en casa.