- Desde la agrupación Conciencia Ecológica de Aguascalientes A.C. se cree que el Centro de Valorización de Residuos a comenzar por el municipio capital carece de planeación y no será funcional
- La ciudadanía debería de empezar por separar desde sus hogares la basura, al menos en biodegradable y no biodegradable
Desde el 2018 el Cabildo de Aguascalientes aprobó la propuesta del proyecto del Centro Integral de Valorización de Residuos Sólidos Urbanos en el Relleno Sanitario San Nicolás, con el cual se pretendía dar un aprovechamiento adecuado a los residuos y con ello cuidar el medio ambiente. No obstante, a partir de que se comenzó a trabajar en los procesos de aprobación por el Congreso del Estado, así como los de la licitación de la empresa, las críticas ante este proyecto han ido creciendo. Además de la problemática estallada la semana pasada con los 250 pepenadores que se muestran renuentes a trabajar en la empresa a instalarse, porque bajo la informalidad están conformes, y del mismo problema de la regularización de esa clase de trabajos, existen posturas de ambientalistas que siguen en contra del centro de valorización de residuos.
Humberto Tenorio Izazaga, dirigente de la agrupación Conciencia Ecológica de Aguascalientes A.C., explicó que este proyecto viene desde administraciones pasadas y que, desde su postura, nunca se ha tenido una planeación adecuada. “No son proyectos que funcionen, son proyectos que en otras partes del país, 25 estados, han fracasado”, agregó el ambientalista. Explicó que con el centro de valorización pretenden separar los residuos que llegan al Relleno Sanitario a través de una inversión millonaria que realmente no tendrá los resultados que se esperan.
La licitación del Centro de Valorización fue ganada por la empresa Pimsa, pero en días pasados Claudio González, secretario de Servicios Públicos del municipio, declaró que todavía no se firmaba el contrato, quedando así pendiente la consumación de esa transacción. Aunado a lo que ya se sabe, Humberto Tenorio Izazaga indicó que el problema con el Centro de Valorización viene desde una incompleta percepción del problema ambiental, pues la ciudadanía en general no separa su basura desde el origen. Desde la postura de su asociación se cree que en algún momento este proyecto podría significar una crisis para el relleno sanitario, a la cual esperan no llegar.
El ambientalista recomendó a la población hacer, cuando menos, la separación primaria desde sus hogares. Ésta consiste en discernir entre restos biodegradables y no biodegradables. Sin embargo, ahí también entra otro problema el cual tuvo génesis en el mismo 2018 que se aprobó el proyecto; la prohibición de bolsas de un solo uso. Aunque Tenorio Izazaga catalogó que esta prohibición termina siendo benéfica para el medio ambiente y es un gran paso en pro de su conservación, queda pendiente dar alternativas para que la población pueda separar debidamente su basura y con ello incentivar un mejor aprovechamiento de los residuos.
Antes, quienes sí separaban su basura, lo hacían a través de bolsas de plástico, cosa que ahora tendrá que hacerse a través de otras opciones más amigables con el medio ambiente y que se adecúen a la nueva reglamentación. Tenorio Izazaga recordó que desde su asociación y con ayuda de algunos expertos, ya se le había advertido al municipio que el centro que planeaban no era viable y reiteró su postura “rechazamos tácitamente el proyecto porque no es funcional”.