- Los ejercicios y planes de acción de gobierno abierto locales no son coercitivos; son fruto del consenso entre autoridades y ciudadanía
- El INAI no puede imponer, calificar ni desacreditar los ejercicios locales; es inadmisible que lo haga y si lo ha hecho se debe corregir de inmediato
El gobierno abierto no es un fin en sí mismo, sino un medio para tonificar la democracia, de manera que sea efectiva y no sólo una simulación, aseveró el comisionado presidente del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Francisco Javier Acuña Llamas.
Enfatizó que, si bien es importante seguir una metodología para implementar los ejercicios locales de gobierno abierto, debe existir cierta flexibilidad a fin de que los planes de acción de cada entidad federativa no sean coercitivos, sino un fruto del consenso entre autoridades y ciudadanía, al impartir la conferencia magistral Transparencia y calidad de la información.
“En el gobierno abierto, por más perfectas que sean sus metodologías, tiene que haber siempre espacio para que haya flexibilidad y haya capacidad en que la singularidad de cada lugar les dé cierto tono y cierto carácter a las acciones”, indicó Acuña Llamas ante representantes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Durango, organismos autónomos y del sector empresarial.
Acuña Llamas destacó que el INAI es un actor determinante para la construcción del Plan Nacional de Gobierno Abierto, pero en el ámbito estatal “debe tener la inteligencia y la humildad de construir con los órganos garantes de los estados las condiciones exactas y convenientes para que el plan local de cada lugar sea el mejor y respetar más singularidades locales”.
El comisionado presidente dijo que el Instituto no puede imponer, calificar ni desacreditar los ejercicios locales de gobierno abierto, “es inadmisible que el INAI lo haga y si lo está haciendo eso se debe corregir de inmediato”.
Reconoció los avances del estado de Durango en materia de gobierno abierto, y el impulso que el Instituto Duranguense de Acceso a la Información Pública y de Protección de Datos Personales (IDAIP) ha brindado para que la entidad concluya el segundo plan de acción.
En un mensaje previo, la comisionada presidenta del IDAIP, Alma Cristina López de la Torre, aseguró que los órganos garantes de la transparencia enfrentan el desafío serio de defender su autonomía y su permanencia: “Desde nuestras instituciones defendemos valores democráticos, la rendición de cuentas, el combate a la corrupción y por supuesto la transparencia. Hoy les refrendo mi convicción de trabajar en la defensa de la autonomía de las instituciones que representamos”.
A su vez, la titular de la Secretaría de Contraloría del estado, Raquel Leila Arreola Fallad, representante del gobernador del estado, José Rosas Aispuro Torres, dijo que la transparencia y la rendición de cuentas en la entidad ya se han convertido en una cultura y constituyen uno de los cuatro ejes rectores del gobierno actual: “No solamente ya es una cultura en Durango la transparencia y el respeto a los datos personales, sino que también ya hemos madurado y ya hemos transitado al gobierno abierto”.
En el evento con sede en el Instituto de Bellas Artes de la Universidad Juárez del estado de Durango, estuvieron presentes las comisionadas del IDAIP, Paulina Elizabeth Compean Torres y Luz María Mariscal Cárdenas.
Con información del INAI