- Contraloría Interna del Congreso debe atender a ambos ordenamientos como base para resolución de quejas y conflictos
- Establecen conductas a servidores públicos para combatir mal manejo gubernamental
Como parte de los lineamientos que estableció el Sistema Estatal Anticorrupción para las instancias gubernamentales a fin de abonar al buen manejo de los gobiernos y atención a la ciudadanía, el Congreso del Estado aprobó la expedición de su Código de Conducta, que se complementa con el Código de Ética que ya había sido integrado, colocándose así en el quinto ente en el ámbito estatal en cumplimiento al respecto, destacó el secretario general del Poder Legislativo, Juan Carlos Raya Gutiérrez.
“La Ley de Responsabilidades nos marca dos grandes cuestiones, sacar un Código de Ética, que los servidores públicos deban cumplir, donde se marcan todas las directrices, norma por norma, qué deben hacer y un Código de Conducta, que sea a manera de actitudes que deben tener esos mismos servidores públicos para cumplir el Código de Ética, entonces son documentos que se complementan”, detalló el funcionario.
Raya Gutiérrez precisó que fue el 12 de junio pasado cuando se aprobó el Código de Ética por el pleno de la LXIV Legislatura, por lo que era importante que se extendiera su cobertura en función el combate a la corrupción con el Código de Conducta.
“Básicamente consiste en establecer muy claramente cuál es la misión, visión y objetivos del Congreso, por un lado, y por otro, es un decálogo de algunas actitudes que deben de tener los servidores públicos, diputados, y todo lo que tenga que ver con Congreso entra en esta bolsa”, explicó el secretario general legislativo.
Agregó que se contempla, entre otros aspectos, las relaciones entre trabajadores, para que sean profesionales, imparciales y armónicas; en el caso de las solicitudes de transparencia, deben ser atendidas a la mayor velocidad posible y con toda la legalidad de por medio.
Sobre las gestiones, Juan Carlos Raya, recalcó que tanto aquellas que son de recursos, como en el caso de servicios, asesoría y otro tipo de apoyo que requiere la población, también deben ser imparciales y otorgarlas, en la medida de las posibilidades del Congreso, a todos los solicitantes por igual.
“Que el trabajo de cada área sea profesional, imparcial, ético; a grandes rasgos es lo que cierra el Código de Conducta; ya normas específicas que digan qué tal o cual conducta está prohibida, están en nuestro Código de Ética, pero este Código de Conducta viene a reforzar, a cerrar la pinza”, explicó el secretario general del Congreso.
Enfatizó que ambos ordenamientos pueden y deben ser revisados por la Contraloría Interna del Poder Legislativo, ya que abren la posibilidad de que los mismos servidores públicos del Congreso puedan hacer lo procedente si tienen alguna queja, así como personas externas que reciban un trato desfavorable en esta instancia. “Tienen todo el derecho a presentar su queja y que se investigue al respecto”, sentenció Juan Carlos Raya Gutiérrez.