- Han sido víctimas de violencia y se estima que un 35 por ciento son hijos de drogadictos
- En julio 22 menores fueron asignados a sus familias adoptivas y hay 25 más susceptibles de adopción
El Sistema DIF estatal mantiene en este momento en resguardo a cerca de 85 menores de edad debido a que han sido víctimas de algún tipo de violencia, desde el abandono hasta situaciones de índole sexual o que han puesto en riesgo su vida; de estos casos, cerca del 35 por ciento viven en un entorno de drogas y consumo excesivo de alcohol, precisó la directora de la instancia, Nancy Xóchitl Macías Pacheco.
Si bien aseguró que no se ha registrado un incremento considerable en este tipo de casos, o al menos la cantidad de menores que deben resguardar no ha variado, “además la población de nuestro albergue es muy fluctuante, a la par de que recibimos muchos niños, para garantizar que no se violenten sus derechos también estamos trabajando una acción muy intensiva para tramitar los juicios de pérdida de patria potestad de todos los menores que puedan ser susceptibles de adopción”, precisó la funcionaria estatal.
Puntualizó que en este tenor se busca agilizar los procesos de adopción, llevando a cabo un detallado análisis de las parejas que se acercan con la intención de ofrecer un nuevo hogar a los menores; la directora del DIF estatal resaltó que cada vez son más los interesados en adoptar, por lo cual es mayor el compromiso de procurar un seguimiento adecuado en el que se certifique la garantía de que los niños están en un ambiente pleno y adecuado para su desarrollo integral.
“Tenemos que hacer nosotros todo lo humanamente posible desde el área de la Procuraduría para que sean liberados lo antes posible y puedan vivir en una familia; en julio pasado se asignaron 22 menores a 19 familias, en este caso porque algunos se fueron como hermanitos a convivir ya de manera permanente con una familia”, detalló Macías Pacheco.
Insistió en que la encomienda es que se lleven a cabo todos los trámites lo más pronto posible para que los menores permanezcan el menor tiempo en los albergues o en resguardo de la instancia que encabeza; apuntó que actualmente un juicio de pérdida de patria potestad puede llevarse de tres a seis meses, que si bien no es un periodo prolongado, se pueden acotar aún más los tiempos al ser procesos relativamente sencillos.
“Nada más exhorta a toda la población a que se acerquen con nosotros, aquellos que quieran agrandar la familia, que no tengan la posibilidad de tener bebés, que se acerquen con nosotros; la verdad es que los trámites son muy sencillos, los documentos que les pedimos son simples, el que más les puede tardar a lo mejor es la carta de no antecedentes penales”; Xóchitl Macías puntualizó que hay cerca de 25 menores susceptibles de adopción en resguardo del DIF estatal.