El secretario de la Defensa Nacional Luis, Cresencio Sandoval, admitió que hubo errores en el operativo mediante el cual intentaron detener a Ovidio Guzmán, hijo de El Chapo, y que derivó en los hechos violentos que aterrorizaron ayer a la ciudad de Culiacán.
Contrario a lo que afirmó anoche el secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, Sandoval señaló que no se trató de algo circunstancial, sino de “una acción directa para la aprehensión “de un delincuente (Ovidio Guzmán López) que contaba con orden de detención con fines de extradición, emitida por un juez federal”.
El mando castrense señaló que la acción estuvo a cargo de la Policía Federal Ministerial, pero –reconoció– “actuó de manera precipitada, (con) deficiente planeación, así como falta de previsión de las consecuencias de la intervención, omitiendo además obtener el consenso de sus mandos superiores”.
El titular de la Sedena expresó lo anterior durante una conferencia de prensa realizada en la capital sinaloense, acompañado por el titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciuudadana (SSPC), Alfonso Durazo Montaño .
Relató que dadas las características de este municipio y las horas hábiles en que ocurrieron los hechos (después de las tres de la tarde), la población fue utilizada como escudo humano por la criminalidad” que finalmente logró la liberación de Ovidio Guzmán.
Dijo que “de haber continuado con el operativo hubiera implicado la altísima posibilidad de víctimas colaterales”, por lo que las autoridades buscaron “garantizar las vidas humanas, por las que nuestro país debe recuperar La Paz.
“Nuestro objetivo es no enlutar hogares, sino resarcir el desgarrado tejido social de nuestra patria. No vamos a regresar a los tiempos de las masacres generalizadas, aún y cuando nos lo pidan desde insistencias dignas de mejores causas. No nos interesa andare por la vida en vuelos en un manto de sangre derramada.
“Vamos a ganar el desafío de la paz, pero no convirtiendo a México en un cementerio mayor al que ya ha sido por tantos años. Nos enfrentamos a grupos que son resultado de décadas de corrupción política y abandono social. Por eso la solución es limpiar al país. No vamos a abandonar nuestra estrategia de paz, como producto de la justicia. No hay falta de Estado ni ausencia del gobierno federal en esta decisión”.
Cresencio Sandoval apareció acompañado por Alfonso Durazo, secretario de Seguridad Pública y también integrante del Gabinete de Seguridad, y por el gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz.
El titular de la SSPC fue reiterativo al señalar que el grupo de Militares y Guardia Nacional que llevaron a cabo el operativo no habían medido las consecuencias de reacción del grupo delincuencial, mismo que no pudo acceder a la casa donde se encontraba Ovidio Guzmán, por el retardó de una orden de cateo.
Como resultado de la ola violenta que se vivió ayer en Culiacán, las autoridades reportaron solo personas muertas, entre civiles, uniformados y sicarios.
A pesar de que la madrugada y mañana de hoy se han reportado cuatro personas sin vida en colonias como el Desarrollo Urbano Tres Ríos, Isla Musala, fraccionamiento Los Ángeles, así como en la salida norte, mandos policiacos aseguran que solo hubo un civil, un uniformado de la Guardia Nacional, un interno del penal de Aguaruto y cinco presuntos sicarios fallecidos durante el intercambio de balas.
El general Sandoval González señaló que hay reporte de 42 vehículos robados con lujo de violencia, nueve unidades particulares quemadas, ya que no reportaron las patrullas de las diversas corporaciones.
Aunado a esto reportaron 19 vialidades bloqueadas y 14 ataques directos en contra de las diversas corporaciones que participaron en el operativo, tras los cuales resultaron lesionados un oficial y cinco agentes de la Guardia Nacional, así como siete militares.