Disidentes de género de Kate Bornstein y S. Bear Bergman (Texere Editores, 2019): un libro de anécdotas, crónicas, ensayos y cómics de gente transgénero y queer de diversas nacionalidades. Es un anecdotario que sirve para empezar a entender otros discursos, otras luchas. Qué significa ser mujer, y qué significa ser hombre. Qué significa ser transgénero y por qué deberíamos de considerar el abandono de los sexos binarios. Aborda formas de comunicación y de sentimiento, de manipulación y del cuerpo. Un compendio de características masculinas y femeninas, y cómo las interpretan quienes deciden atravesar las líneas de lo común, que pueden ser aprovechadas no sólo para el discurso, pero abrir puertas y comenzar diálogos. Aventuras sobre una sexualidades transgresoras, cómo se descubren y desarrollan en ambientes tan diversos como el deporte (rollerblading) y los negocios. Un puñado de anécdotas que discuten sobre la libertad y los derechos, el lenguaje y el erotismo, y lo hacen especialmente con amor porque sus editores imaginan un mundo de cuerpos transformados y liberados.
Los anacrónicos y otros cuentos de Ignacio Padilla (FCE, 2010): tres cuentos con un ritmo sabroso y un puntual manejo de la ironía. Son breves. El libro es muy barato, conviene que el lector compre y lea para que yo no se los arruine, pero puedo contar algunas experiencias que versan alrededor del libro y del autor esperando provocar algo. Muchas veces he escuchado de Ignacio Padilla que era un escritor elegante, y los tres cuentos que componen este volumen es un ejemplo de ello. Son cuentos elocuentes, que gozan de colocar, desarrollar y alcanzar una prosa única. Cuentos sobre hombres que parecen iniciar la cantaleta del arrepentimiento pero se echan para atrás y aceptan su condición en el universo bajo el cual los somete el narrador. Una crueldad, pero cariñosa, quizás. Leer estos cuentos es como escuchar el sonido de los segunderos y los minuteros, en vez de acertijos elaborados, los imagino como relojes o cajas musicales.
El dragón blanco y otros personajes olvidados de Adolfo Córdova (FCE, 2016): libro de cuentos que en conjunto crean un universo común para algunos personajes secundarios de libros juveniles, fantásticos. Desde aquí, puedo escuchar como la gotita de sudor deslizaba en la frente de Adolfo para lograr la perfección de algunos cuentos, pero no describiré más esa escena, porque me gustaría primero confesar que también envidio su arrojo y su valentía para construir un universo propio de ficción sobre lo que otros nada más hemos conseguido soñar. Que yo diga si son perfectos o no, no cuenta, porque el gozo está en la lectura, la perfección es para lectores quisquillosos y, mayormente, aburridos. Mis dos cuentos preferidos en este volumen: El nacimiento del alado Rey Mono (El mago de Oz) y El destino de los niños perdidos (Peter Pan). Si puede hacerse a la mano de este libro, haga que los niños lo lean en voz alta a los perros. Así los verá soñar.
Su cuerpo dejarán de Alejandra Eme (Enjambre Literario, 2019): un largo y preciso ensayo sobre lo que significa cuidar a otros, especialmente a los más viejos. Indagar lo que significan las edades en estos días, además de analizar cómo los procesos de procurar el bienestar a nuestros familiares han cambiado junto con los tiempos. Qué significa el cuidado de los padres, los abuelos y qué significa, más tarde, cuidar a los padres y los abuelos. Comprender, eventualmente, el enigma de ciertos chascarrillos en el lenguaje de los familiares además de resolver el enigma de los silencios. Quiénes somos cuando los otros dependen de nuestras rutinas de limpieza, de cocina, de lectura. Quizás la mejor conclusión del libro de Alejandra es descubrirnos parte de una cadena: aún cuando no lo deseamos, aún cuando se han ido, nuestra existencia también está atada a la historia de los otros.
El libro de la imaginación de Edmundo Valadés (FCE, 1976): pequeñas bestias de imaginación y fantasía indexadas temáticamente para el placer de los organizados. No sabía que podía tener un libro tan precioso y tan conciso como este en mi biblioteca. De lectura rápida, propone un abanico de humores para lectores inquietos. Además de cuentos breves, fantasías y alegorías, también contiene algunos fragmentos de novelas y deslices oníricos. Podemos suponer que es una caja de chocolates, pero algunos contienen gusanos por dentro, y eso también, por extraño que parezca, puede ser placentero.