- Se espera que aún haya precipitaciones que ayuden a que se pueda cosechar la avena subsidiada por Sedrae y Sader
- Ya se han detectado sembradíos de maíz de temporal afectados definitivamente por la falta de agua
- De no haber cultivos forrajeros industria ganadera se vería afectada
La falta de lluvia pondría en riesgo la avena subsidiada por la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroempresarial (Sedrae) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), pues de continuar con las pocas precipitaciones incluso este resistente cultivo forrajero podría ser afectado, lo cual a su vez afectaría a los ganaderos del estado.
El 4 de septiembre el titular de la representación de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Aguascalientes, Rafael Calderón Zamarripa, afirmó que para la temporada de lluvias 2019 aún se esperaban precipitaciones hasta el 15 de septiembre, cosa que para el 11 de este mes aún no ha ocurrido, al menos como se esperaba, según el titular de Sedrae, Manuel Alejandro González Martínez.
De cualquier manera el funcionario se mostró positivo de que se presenten lluvias en lo que resta de septiembre, pues últimamente ha estado nublado: “Sin embargo, sí nos ha estado lloviendo de manera dispersa, hemos hecho algunos recorridos hacia El Llano, hacia Asientos y Tepezalá y sí se ven afectaciones en las primeras siembras de maíces de temporal”.
Los maíces de temporal, explicó el titular de Sedrae, están afectados y aunque llueva en lo que resta del mes lograrán rescatarse aunque aún no se conoce cuántas hectáreas son las que están en esta situación de las 54 mil que se sembraron: “Habría que valorar las pérdidas que hay en esas 54 hectáreas que sí se sembraron”.
Manuel González recordó que ante la falta de lluvias quedaron pendientes otras cerca de 40 mil hectáreas de temporal por sembrarse, mismas que esperan una mejor temporada para hacerlo, que no quisieron tomar el riesgo: “Llegamos más allá de la mitad, a un 55 por ciento de siembras, pero habría que valorar cuáles son los efectos de la sequía en eso”.
El funcionario estatal apuntó que tomando en cuenta la sequía se emprendió el programa de subsidio a avena entre la Sedrae y la Sader, un cultivo que se presta para el ciclo otoño invierno, con menos demanda de agua, por lo que se espera que con las pocas lluvias que se puedan presentar en los meses que restan de 2019 se pueda llegar a sacar esa cosecha.
Según González Martínez ya se ha comenzado con las primeras siembras de avena misma que se espera sea próspera, pues pese a la ausencia de precipitaciones la tierra tenía humedad: “Con la humedad que había sí va a nacer, va a crecer algo pero si no sigue lloviendo sí va a haber afectaciones, no vamos a poder levantar forraje que es lo que necesitamos”.
La avena subsidiada, agregó el titular de la Sedrae, sería principalmente aprovechada para forraje por lo que en dado de caso que no se pueda levantar este cultivo o el maíz sembrado, también podría haber repercusiones para los ganaderos: “Ahí tiene dos implicaciones, el alza de precios y el incremento de desecho de ganado hacia el rastro”.