- En el ámbito nacional se estima que estas empresas de outsourcing o terciarización evaden aproximadamente 21 mil millones de pesos al año
- El trabajador se da de alta con el salario mínimo, 102.68 pesos general en México, y aunque es remunerado en otras bonificaciones esto afecta su cotización al Afore para la jubilación, precarizándola
El outsourcing, también llamado terciarización, externalización o subcontratación es un método para emplear trabajos de manera que la empresa pueda invertir menos en el trabajador. Actualmente es una realidad latente no sólo en el país, sino también en Aguascalientes. Gerardo Sánchez Herrera, asesor financiero del Colegio de Economistas de Aguascalientes explica que esta metodología de contratación cae en una simulación laboral.
Dentro de esta simulación laboral destaca las malas prácticas que afectan al trabajador. Una de las más comunes es dar de alta al mismo por honorarios, las consecuencias de trabajar por honorarios se ven en que los trabajadores no disponen de utilidades, aguinaldo, Infonavit, Seguro Social y que los pueden liquidar en cualquier momento sin que éste sea un proceso complicado y que beneficie en otros aspectos al extrabajador.
Otra práctica que no favorece a los trabajadores se observa en la forma de pago; se da de alta al contratado con salario mínimo (102.68 pesos, según el último reporte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social) y a este se le da otra remuneración que en su mayoría se le ve denominado como “bono”. Aunque esto puede elevar el sueldo, perjudica al sector de trabajadores de manera que la cotización que realicen para su Afore es con base en el salario mínimo registrado, dejando así de lado la posibilidad de cotizar una pensión decente de jubilación.
El asesor financiero del Colegio de Economistas del estado, exhorta al Gobierno Federal para que regularice el abuso de estas prácticas, pues afectan también directamente al Servicio de Administración Tributaria (SAT). En el ámbito nacional se estima que estas empresas de outsourcing o terciarización evaden aproximadamente 21 mil millones de pesos al año (en impuesto). Gerardo Sánchez explica que ya no sólo afectan al trabajador, sino también a las mismas arcas federales (evadiendo el fisco). En el país existen cerca de 6,000 empresas que brindan el servicio de externalización o subcontratación.
Ejemplifica diciendo que en la banca comercial existen 258,000 trabajadores activos y el 52 por ciento de estos están dentro de este esquema. Explica que tampoco hay que satanizar a todas las empresas que se rigen por este sistema, pues el outsourcing salió como recurso alternativo en caso de que alguna empresa no quisiera abrir un departamento, por ejemplo y en su mayoría, de limpieza. Por esta razón contratan a una empresa que ofrezca este servicio.
Tanto el SAT como la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, necesitan trabajar en conjunto para detectar las malas prácticas que están contaminando al esquema del outsourcing. El método no es malo, y en algunas situaciones parece viable, el problema radica en que se comenzó a abusar de él surgiendo así las prácticas deficientes, “de un uso se hizo un abuso”, concluye el economista.
Gerardo Sánchez explica que hay más de 100 empresas en el estado que contratan bajo la terciarización, entre los giros más comunes se encuentran los call centers, de mantenimiento, de limpieza y algunas manufactureras de diferente índole. El gobierno también contrata haciendo uso del sistema de outsourcing, pues es común que el mismo proponga proyectos temporales en los que se ve viable la opción de contratación por honorarios.