- Prácticamente toda la zona de temporal se encuentra sembrada
- Son cerca de 90 mil hectáreas de maíz y frijol de temporal y se lleva a cabo la reconversión a maguey
- Productores de aguacate deberán esperar a menos un año más para beneficiarse con las ventas del fruto
El titular de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroempresarial, Manuel Alejandro González Martínez, afirmó que se esperaba el inicio de la temporada de lluvias desde junio, mismas que no se han registrado a plenitud lo que provocó el retraso en las siembras de maíz y frijol de temporal programadas.
Señaló que a la par de ello las precipitaciones se han presentado de forma aislada y sólo en algunas partes del estado, siendo en el campo donde se ha registrado mayor sequía; las lluvias torrenciales se presentaron en la última semana de julio en la capital no afectaron a las zonas de siembra.
“Estamos deseosos de que siga lloviendo en el campo y de manera más uniforme”; el funcionario estatal destacó que desde hace aproximadamente 10 días se incrementó la siembra en muchas de las hectáreas de temporal en el estado, por lo que confió en que se pueda regularizar esta situación y no pase a mayores afectaciones por la falta de lluvias.
Resaltó que, en el caso particular de hortalizas y forraje de riego, las cosechas se realizarán en tiempo y forma; si bien, derivado de la misma sequía se presentaron algunos brotes de gusano cogollero en los maíces, se atendió de inmediato para evitar que la plaga se propagara, las aguas pluviales ayudan mucho a que disminuya este problema: “Ahorita prácticamente tenemos el dato de que toda la zona temporalera ya ha llovido lo suficiente para sembrar, sin embargo, todavía tenemos la duda del temporal cómo siga su curso y que los cultivos puedan llegar a buen término. Esperaríamos que ya se normalice este temporal para que esas siembras que se están haciendo ahorita se puedan concluir bien”.
El funcionario estatal detalló que son cerca de 90 mil hectáreas entre maíz y frijol, así como las plantaciones de maguey que se están estableciendo ya que cerca de 250 hectáreas de los terrenos que se tenían para maíz han migrado a este cultivo, al ser la misma vocación de este terreno. Los cultivos de temporal se concentran principalmente en los municipios de El Llano, Asientos, Tepezalá y Cosío.
González Martínez precisó que en el municipio de Calvillo no se ha podido aprovechar el incremento en el precio del aguacate, para que los productores de la zona se beneficien; explicó que son cultivos de largo plazo que apenas el año pasado comenzaron a establecerse y se requiere de al menos dos o tres años para que se pueda cosechar el fruto: “Pero estamos confiados de que es una zona donde sí es apta para la producción y derivado de la gran demanda que tiene el aguacate a nivel internacional, nos van a seguir tocando estos precios”.
Aclaró que en una primera etapa no se podrá considerar la exportación de esta cosecha de aguacates, debido a la complejidad que implica, pero se atenderá al mercado local y regional, aprovechando la cercanía de Calvillo con Guadalajara; esto ayudará a aumentar la rentabilidad del campo y cumplir con los requisitos que se requiere para que el fruto salga del país.
El titular de Sedrae precisó que son pocos los productores que han dejado de lado los cultivos de guayaba para apostar al aguacate, la mayoría de las hectáreas que se han establecido en las huertas abandonadas y en los terrenos ociosos o desocupados, por lo que se fomentan ambos cultivos para alternativas más rentables: “Esa es la apuesta, seguir incrementando la superficie de ambos cultivos. Hay muchas huertas abandonadas que inclusive no se les está sacando provecho, pero, por otro lado, también se vuelven un foco de plagas y enfermedades; al no tener el cuidado, al no fumigarlos, al no atenderlos, se vuelve un foco de dispersión de insectos; es importante eliminar esas huertas abandonadas y aprovecharlas si es que tienen riego para fomentar estos nuevos cultivos”.
González Martínez destacó que por parte de Sedrae se llevan apoyadas 140 hectáreas de limón, entre 40 y 45 hectáreas de aguacate; faltan por establecerse otras este año, ya que el apoyo se entregó en 2018, pero de forma tardía y no se arriesgaron a plantar por las implicaciones del frío.
“Es importante difundir que el programa sigue vigente, ese no tiene fecha de cierre, salvo a final de año o hasta agotar el presupuesto, pero tenemos un objetivo ambicioso de llegar al menos a 2 mil hectáreas en cultivos de reconversión, no sólo limón y aguacate, sino en todos los que estamos promoviendo”, el titular de Sedrae subrayó que de esta meta llevan cerca de mil 100 hectáreas.