- Los alimentos que se pueden comer crudos son verduras, frutas y cereales
- El 28 de agosto se conmemora el Día Internacional de la Comida Cruda
Al preferir el consumo de alimentos crudos como las verduras, en lugar de cocerlos o cocinarlos se obtienen diversos beneficios, ya que aportan una mayor cantidad de fibra que mejora el sistema digestivo, reducen el “colesterol malo” y contribuye en el control de los niveles de glucosa en sangre, todo ello de importancia en la prevención de enfermedades crónicas como obesidad y diabetes.
Marcel Camacho Pérez, nutricionista dietista de la Unidad de Medicina Familiar No. 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), indicó que según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2016 (Ensanut), la ingesta de verduras y frutas en México es baja, menos de la mitad de la población consume regularmente verduras y frutas.
La recomendación de la Organización Mundial de la Salud es comer al menos cinco porciones diarias para reducir el riesgo de desarrollar diversos padecimiento: “Esto implica que la cantidad de fibra que consumimos es menor a la que necesita nuestro organismo. La evidencia científica ha demostrado la relación directa entre una dieta alta en fibra y una buena salud, fibra que se obtiene principalmente en las verduras y frutas crudas”.
Los alimentos que se pueden comer crudos, dijo, son: verduras por ejemplo, calabacita, chayote, espinacas, pimiento morrón y col; todas las frutas -en pieza o gajos, no en jugo-; cereales como el amaranto y avena, otros alimentos que contienen grasa como aguacate, aceite de olivo, semillas de girasol, nueces y cacahuates, entre otros.
En el Día Internacional de la Comida Cruda, que se conmemora el 28 de agosto, afirmó que un alimento crudo “es aquel que no se ha sometido a una cocción o altas temperaturas, y que alteran su composición nutrimental, particularmente aquellos que contienen vitamina C pues son más propensos a perderla”.
A fin de evitar riesgos de enfermedades, es necesario lavar y desinfectar verduras y frutas antes de comerlas; lavado de manos antes de preparar los alimentos; usar diferentes utensilios y tablas para picar, esto es, una exclusiva para verduras y frutas, y otra para carnes, declaró.
Respecto a la ingesta de pescado, mariscos, carne de res, cerdo, pollo y huevo crudos, la Nutricionista Marcel Camacho subrayó que representan un riesgo para contraer enfermedades, por lo que se tienen que someter a una cocción para eliminar bacterias, virus y parásitos.
Destacó que para una alimentación correcta debemos incluir los tres grupos del Plato del Bien Comer en cada una de las comidas principales, elegir verduras y frutas de temporada, y disminuir el consumo de productos industrializados.
La información de cuántas porciones de los grupos de alimentos necesita cada persona, según su edad, talla, peso y condición de salud, se brinda de manera personalizada en el servicio de Nutrición de las Unidades de Medicina Familiar del IMSS; además, en la sesión Nutrimss Aprendiendo a Comer Bien se otorgan herramientas para mejorar los hábitos alimentarios.
Con información del IMSS