- Se registra un nivel mayor al 50 por ciento en nepotismo, sólo en el Poder Judicial
- En la iniciativa privada las empresas reprueban en medidas anticorrupción
Se requiere de una acción decidida de los gobiernos para hacer frente al problema de la corrupción y la impunidad en México. Esta función recae principalmente en instancias como las corporaciones policiales -cuya encomienda es prevenir este tipo de delitos- y la Secretaría de la Función Pública -cuya responsabilidad es vigilar el comportamiento de las entidades gubernamentales-; pero también es fundamental el papel que juegan los instrumentos de transparencia y de procuración de justicia para que se investiguen y acusen los delitos, se imparta justicia y se rehabilite a los responsables.
No obstante, el presidente de la asociación Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, Claudio González Guajardo, enfatizó que todo el proceso de prevención hasta la rehabilitación está plagado de inconsistencias en el país, ya que no hay una eficiente labor de parte de la policía, carecen de certeza las instituciones de auditoría y transparencia, y en procuración de justicia se registra un lamentable nivel de impunidad que alcanza el 97 por ciento de los delitos denunciados.
“De qué te sirve una organización que cumple su función en 3 por ciento, en nada, es fallido; los juzgados, algunos funcionan mejor, otros no funcionan, unos son honestos, unos son corruptos; tenemos que seguir limpiando y profesionalizando. Las cárceles son escuelas del crimen, muchas de ellas dominadas por las personas ahí internadas”, resaltó el activista.
Por ello insistió en que se debe presionar al gobierno para que cumpla con esa función, pero recordó que es necesario que primero seamos ciudadanos de primera, que participemos de manera proactiva y responsable en nuestras obligaciones; destacó que sólo con acciones de la sociedad se puede evidenciar los malos manejos de los gobiernos, el desvío de recursos en que incurren algunos funcionarios y el nepotismo con que se actúa en instancias públicas.
Detalló que se ha documentado cómo en las tres elecciones previas a los comicios del año pasado donde se eligió al presidente de la República, los aspirantes a las gubernaturas de todos los partidos rebasaron en promedio once veces los topes de campaña establecidos, dinero que podría haberse aplicado en salud, educación y programas para sectores vulnerables.
En el caso del nepotismo, González Guajardo precisó que en México el 51 por ciento los jueces y magistrados del Poder Judicial Federal tienen en promedio entre uno y tres familiares dentro de la dependencia: “Si el Poder Judicial no hace justicia al interior del Poder Judicial, entonces cómo va a hacer justicia afuera del Poder Judicial”.
Recalcó que esta situación no es privativa de la función pública, en la iniciativa privada se evaluó a las 500 empresas más importantes del país para medir su gobierno corporativo y las medidas anticorrupción tomadas al interior; resultó que el nivel promedio de evaluación fue de 30 puntos porcentuales: “Este es un fenómeno público, pero también es un fenómeno privado, es un fenómeno social y lo estamos señalando”, es por ello que las empresas también se deben comportar a la altura para hacer frente a este problema.