- La corrupción en México se refleja principalmente en falta de infraestructura y sectores públicos rebasados
- El Sistema Anticorrupción está funcionando, pero no es una varita mágica
El mayor enemigo de un gobierno corrupto es una sociedad preparada, destacó el contralor del Congreso del Estado, Roberto Valdés Ahumada; este problema azota al país y afecta de manera directa en el sistema político, en la economía y en la percepción que la sociedad tiene de la forma en que se dirige al país.
Recalcó que a partir del contexto neoliberal el sistema político empieza a cambiar, los ritmos de la sociedad y su participación son distintos; específicamente en México, en las últimas décadas, se ha transitado de una dictadura a una democracia, a la que, sin embargo, le falta mucho por avanzar: “Es competencia de nosotros el cómo participemos en ella”.
Precisó que la corrupción, según la definición del Premio Nobel de Economía en 1976, Milton Friedman, es la intrusión de manera eficiente por medio de reglamentaciones de un gobierno en el mercado; enfatizó que en México se evidencia en desfalcos millonarios, en la falta de infraestructura pública y vial, y cada vez que el sector salud o el sector educativo se ven rebasados: “En Estados Unidos pasó algo que cambió al mundo, en 2008 sufrimos la crisis de las viviendas subprime donde se tuvo el caso de mayor corrupción a nivel mundial; eso da para que los organismos internacionales dieran origen al COSO 2013”
El contralor del Congreso local destacó que con ello se comienzan a implementar mecanismos de transparencia, de fiscalización y rendición de cuentas; en mayo de 2015 se da el primer paso para el Sistema Nacional Anticorrupción.
Enfatizó que como sociedad se esperan cambios inmediatos; el Sistema Anticorrupción funciona, pero no es que se trate de una varita mágica con la que de repente los ingresos per cápita serán más elevados, no habrá más corrupción, robos, asesinatos, entre otros problemas que afectan la estabilidad del país, por lo cual reiteró que se requiere una participación activa de la ciudadanía.
“Evidentemente en Transparencia Internacional México está ubicado en el lugar 139 de 180 países; claro, nos falta mucho por avanzar, pero estamos siendo mejor en cada momento y eso depende mucho no de la clase política, no de los órganos internos de control, no de la parte social o de las personas que están en transparencia, nos compete a todos como país”, sentenció Valdés Ahumada.
Recordó que es mayor el poder que tiene la sociedad que aquel que pueda llegar a tener cualquier gobierno, expresión partidista o tendencia política; depende de la voluntad de los ciudadanos que se pueda alcanzar un verdadero cambio; lamentó que en México se ha sembrado la mala idea de que quien no es ventajoso sobre los demás no va a poder alcanzar las metas que tiene; es lacerante.
El contralor del Congreso del Estado dijo que cada quien, desde su trinchera, debe comenzar a transitar de una manera congruente y con convicción; los países menos corruptos son aquellos que presenta menores índices de alfabetización, hay mayor ingreso per cápita; es a lo que se debe apostar. “Donde la gente tiene mayor índice de felicidad y en donde viven mejor no tienen corrupción, porque la gente está preparándose, se está llenado con ideales, con ciencia, con educación, con virtud, porque el mayor enemigo del ser humano es la ignorancia”.